El Ministerio de Sanidad pide prudencia y vigilar a los menores para evitar ahogamientos
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha pedido prudencia para evitar ahogamientos y lesiones graves en medios acuáticos.
El joven de 15 años que perdió la vida en una piscina de Arganda del Rey es la primera persona que muere ahogada en la región en espacios acuáticos (ríos, piscinas y otros) en lo que va de año.
El año pasado, hasta el mes de junio, Madrid era la única comunidad que no había registrado ningún caso. En los cinco primeros meses de 2016 hubo dos ahogamientos y en el mismo periodo de 2015 seis, según datos del Informe Nacional de Ahogamientos de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo.
En toda España (incluidas las playas), en el año 2015 murieron ahogadas 458 personas y en 2014 siete menos.
Sanidad destaca que la principal causa de fallecimiento en el medio acuático es el ahogamiento por sumersión accidental: en 2015, 430 personas fallecieron por esta causa, cuatro menos que el año anterior.
De esas 430 personas, 184 eran mayores de 65 años; 203 tenían entre 21 y 64 años, y las 49 restantes eran niños y jóvenes menores de 20 años, un tramo de edad en la que se ha registrado un incremento del 48 %.
El departamento liderado por Dolors Montserrat pide que se extreme la precaución con menores, que han de estar vigilados por un adulto en todo momento al estar en el agua o cerca de ella.
Los menores tienen más problemas en las piscinas, mientras que los adultos se ahogan con mayor frecuencia en aguas naturales durante el baño, la pesca o al practicar algún deporte náutico.
Sanidad sostiene que en 2015, a las 430 muertes por sumersión accidental hubo que sumar 18 ahogamientos fatales por accidentes ocurridos en medios de transporte por agua (embarcaciones, motos acuáticas, etc.), otros 4 por traumatismo causado por zambullida y otros 6 ahogados cuyas causas concretas de muerte se desconocen.
Asimismo, en 2015 un total de 600 personas fueron hospitalizadas como consecuencia de un ahogamiento no fatal, de las que 203 eran mayores de 65 años y 212 menores (177 menores de 10 años).
El ministerio detalla que en 81 de esos casos, la lesión se produjo por saltar o tirarse de cabeza al agua y que 19 personas sufrieron una lesión medular como consecuencia del accidente.
Para evitar estos accidentes, Sanidad ha emitido una serie de recomendaciones, como asegurarse de que la piscina cuenta con medidas de seguridad (socorrista o cercado perimetral), vigilar a los menores en todo momento o usar un chaleco salvavidas para practicar un deporte acuático.
En la playa se debe respetar el significado de las banderas y no bañarse nunca si está roja, evitar el consumo de alcohol antes del baño, y no bañarse de noche ya que, si ocurriera algo, nadie podría verlo.
Sanidad recomienda, asimismo, no sobrestimar la condición física ni capacidad para nadar y bañarse siempre acompañado, sobre todo si es una persona mayor o padece algún problema de salud.
Advierte de que tirarse de cabeza desde una gran altura, en lugares de poca profundidad o sin conocer si existe algún obstáculo en el fondo puede producir lesiones muy graves y recomienda salir enseguida del agua si se encuentra cansado o siente frío.