El presidente valenciano se suma a una medida que también llevará a cabo Andalucía y que estudian otras cuatro comunidades socialistas, en contra del criterio del Gobierno
El presidente de la Comunidad Valenciana, el socialista Ximo Puig, avanzó este martes la deflactación del IRPF para rentas inferiores a 60.000 euros, una medida similar a la propuesta por el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, de rebajar este impuesto por debajo de los 40.000 euros, y que también aplicarán Madrid y Andalucía. Además, otras cuatro comunidades socialistas estudian hacerlo.
La reforma fiscal valenciana anunciada por Puig también incluye la ampliación en un 10% de «todas las deducciones y bonificaciones fiscales», aunque mantendrá el impuesto de patrimonio, suprimido o bonificado al 100% en Madrid y Andalucía. Las nuevas medidas tendrán efectos «desde ya» y con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2022, aseguró el presidente valenciano.
Puig hacía este anuncio en el Debate sobre el Estado de la Comunidad, después de acusar a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de «dumping fiscal» por bajar los impuestos, y tras pedir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, castigar en el reparto de fondos estatales a las autonomías que bajen impuestos.
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha celebrado el cambio de postura del presidente valenciano. «La ministra anuncia subidas de impuestos, Puig despreciaba esa política y ha terminado bajando impuestos, como lo hacemos en Madrid desde hace 18 años», ha escrito Díaz Ayuso en su cuenta de Twitter tras conocer el anuncio.
Un anuncio que no ha sentado nada bien en el Gobierno central, que ha reclamado este martes «responsabilidad a todos». «La posición del Gobierno es clara, es la que hemos mantenido hasta ahora», aseguraba la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Lo cierto es que el anuncio de Puig va en contra de la hoja de ruta que propone Sánchez. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha señalado que en los próximos días el Gobierno presentará un paquete de medidas fiscales más allá del impuesto a los ricos, tras rechazar la propuesta del líder del PP de bajar el IVA de algunos productos básicos de la cesta de la compra.
El debate de la deflactación del IRPF lo abrió Feijóo y lo continuó Ayuso, que el pasado 12 de septiembre, en el Debate del Estado de la Región, anunció el adelanto a este año 2022 de la deflactación de la tarifa autonómica del IRPF, una medida que pretende que los ciudadanos sigan aportando lo mismo que hasta ahora para que la subida de sus salarios pueda destinarse a hacer frente a la subida de precios.
Tras la Comunidad de Madrid fue Andalucía, también gobernada por el PP, la que se sumó a las rebajas fiscales, deflactación y patrimonio. Ahora es Puig, del PSOE, el que sigue la misma línea, unas rebajas que también están estudiando otras cuatro comunidades autónomas socialistas, entre ellas Castilla-La Mancha, en contra del criterio de Moncloa y del PSOE.
