Miguel Ángel Sánchez Muñoz, más conocido como Míchel, ha emergido como una de las nuevas figuras revolucionarias de La Liga, liderando al Girona FC a una temporada que promete ser histórica para los gironins
APUESTAS. – El entrenador madrileño ha cogido a un equipo históricamente abonado a luchar por la permanencia a liderar el torneo de la regularidad. La historia de Míchel es la de un entrenador acostumbrado a sacar mucho con muy pocos recursos, desde sus inicios en el Rayo Vallecano hasta su aterrizaje en un Girona en el que está haciendo maravillas.
De jugador a entrenador
Míchel inició su carrera en el mundo del fútbol como jugador en el Rayo Vallecano, club en el que se mantuvo durante la mayor parte del tiempo que duró su carrera futbolística. Tras retirarse en el año 2012, Míchel realizó los estudios previos para poder ocupar los banquillos, y comenzó su carrera como entrenador en el fútbol formativo del propio Rayo Vallecano. Gracias a su tiempo en el fútbol base, su primera oportunidad como entrenador absoluto llegó precisamente en el club del barrio de Vallecas: tras el despido de Rubén Baraja, asumió el banquillo de su equipo y pudo darle la vuelta a las apuestas deportivas que ya le veían en Segunda B: pasó de lograr la permanencia a conseguir el título de la Segunda División, devolviendo al club a La Liga.
Sin embargo, en marzo de 2019 el club volvía a encontrarse en una situación precaria. Estaban en puestos de descenso en Primera División y la directiva pensaba que necesitaban hacer cambios urgentes… lo que llevó al final de Míchel en el banquillo vallecano. En junio del mismo año, firmó con la Sociedad Deportiva Huesca, con la que consiguió inmediatamente después el ascenso a La Liga. Una vez más, una racha de malos resultados acabó con su carrera en el club, un año y medio después de haber comenzado su trabajo.
El aterrizaje en Girona
La historia de ‘entrenador ascensor’ de Míchel tendría un capítulo más en el Girona FC. Tras un comienzo dubitativo, los gironins entraron en el playoff de ascenso a Primera División en la sexta posición… para terminar ganándolo y subiendo a La Liga, el tercer ascenso del madrileño y el segundo del club. Además, en esta ocasión Míchel lograría terminar la temporada y la permanencia, algo que había sido imposible en Vallecas y Huesca.
El club tuvo un cambio radical con Míchel en el puesto de director técnico. El Girona, desde su llegada, ha aplicado un estilo de juego audaz y muy ofensivo, que le ha llevado a desafiar las expectativas de las apuestas La Liga, con triunfos ante gigantes del país como el FC Barcelona. Su enfoque táctico, junto con la habilidad que ha demostrado Míchel para inculcar una fuerte mentalidad en el equipo, ha convertido al Girona en un equipo capaz de liderar La Liga tras media competición disputada. Bajo su dirección, el Girona FC ha desarrollado una identidad de juego clara y atractiva, y su desafío liguero ya está recibiendo comparaciones con el triunfo del Leicester CF en la Premier League.
⌊ Este es un contenido externo patrocinado. Para más información contacte con publicidad@miracorredor.tv.