La presidenta madrileña había abandonado la Conferencia de Presidentes, tal y como dijo, tras la intervención en euskera del lehendakari, y ha regresado cuando se ha vuelto a hablar en español
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha intervenido este viernes en la Conferencia de Presidentes, donde ha rechazado el uso de las lenguas cooficiales con traducción simultánea, lo que ha calificado como la «maniobra del pinganillo» por parte del Gobierno.
Según ha defendido, esta fórmula, utilizada por el Gobierno por primera vez para poder hablar en catalán, gallego o euskera, «se instrumentaliza y se utiliza la riqueza de las lenguas regionales para hacernos sentir extranjeros en nuestra propia casa».
Ayuso ha señalado que «es un disparate hablar en español en el pasillo durante el café y luego ponerse un pinganillo para tratar aquí los temas de todos los españoles». La presidenta ha lanzado este mensaje durante su intervención en la reunión junto al resto de presidentes autonómicos.
Antes, había consumado su anuncio previo: ha abandonado la Conferencia cuando el lehendakari, Imanol Pradales, ha intervenido en euskera. Ha regresado a la sala en el momento en que los intervinientes han vuelto a expresarse en español.
La jefa del Gobierno madrileño ya había advertido este jueves en la Asamblea de Madrid que no se pondría el pinganillo durante las intervenciones en lenguas cooficiales. «Todo lo que me tengan que decir, en el mismo idioma, en español», subrayó.
Además, había criticado que «en lugar de defender el español en todos los rincones, lo que hacen es utilizar el catalán, la lengua de los catalanes, para hacer provincianismo con el secesionismo catalán, que es una corruptela que no pienso pagar».
Además, Díaz Ayuso ha rechazado condonar la deuda a Cataluña mientras existe un sistema de financiación que «solo beneficia a los nacionalistas», ha dicho durante su intervención en la Conferencia de Presidentes celebrada hoy en Barcelona, donde ha defendido que Madrid es la región que «más aporta».
«El cupo catalán no cabe en la Constitución, aunque ahora todo es posible. Ahora ya se sabe que todo lo que no está prohibido expresamente pues palante», ha señalado la presidenta en su discurso ante sus homólogos y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.