La Guardia Civil reconstruye los hechos seis años después del asesinato y abre una nueva línea de investigación tras descartar al principal sospechoso
La Guardia Civil ha reabierto el caso del asesinato de Miriam Vallejo, la joven de 25 años que apareció muerta entre Meco (Madrid) y Villanueva de la Torre (Guadalajara) en enero de 2019. La causa estaba archivada de forma provisional, pero se ha reactivado por nuevos indicios que apuntan a más de un autor, según fuentes policiales.
Este jueves, a las 10:00 horas, se ha realizado una reconstrucción de los hechos en los puntos clave de la investigación: el camino vecinal de Meco, donde fue hallado el cuerpo, y la urbanización de Villanueva, donde Miriam compartía casa con Sergio — hasta ahora, el principal sospechoso y único investigado — y la novia de este, Celia.

Diligencia de reconstrucción de los últimos momentos de vida de Miriam Vallejo (Imágenes: El Heraldo del Henares).
La joven fue atacada con extrema violencia mientras paseaba a cuatro perros. Había salido esa tarde-noche de enero a probar unos collares luminosos. Recibió 89 puñaladas, muchas de ellas defensivas. El filo del cuchillo quedó incrustado en el cráneo y el mango nunca fue hallado, por lo que no se pudieron extraer huellas.
Desde el principio, la investigación se centró en Sergio, su compañero de piso. Fue detenido, pero tiempo después quedó en libertad por falta de pruebas concluyentes. La única prueba genética en su contra fue descartada por posible transferencia de ADN, al compartir vivienda y colada con la víctima.
Después apareció otro nombre, Alberto, un preso toxicómano — que coincidió con Sergio en la cárcel — y que confesó el crimen ante sus terapeutas. Sin embargo, su relato fue rechazado por inverosímil y su perfil genético no coincidía con los restos hallados en la escena.
La jueza de Alcalá de Henares decretó el archivo provisional, al considerar que la investigación había fracasado. Aun así, dejó abierta la posibilidad de reabrir el caso si aparecían nuevas pruebas, como ha ocurrido ahora.
Una nueva línea de investigación sugiere que podría haber varios autores. Así lo respaldan los testimonios de la pareja que encontró a Miriam malherida. Según su versión, la joven gritó «soltadme, dejadme», lo que apuntaría a una agresión múltiple. Un crimen que conmocionó al Corredor del Henares y que, ahora, podría estar más cerca de resolverse gracias al trabajo de la Guardia Civil.