El bloque desarticulado estaba asentado en un local okupado en Arganda, desde donde seguían a sus víctimas hasta Rivas para asaltarlas
Agentes de la Guardia Civil, en el marco de la operación «Ruqun», han desarticulado un bloque de la banda juvenil Blood en la localidad de Rivas-Vaciamadrid.
La investigación comenzó en mayo, tras un aumento de robos con violencia en las inmediaciones de la estación de Metro de la localidad. Los agentes realizaron comprobaciones para identificar a los autores y conocer su modus operandi.
Según las pesquisas, los supuestos autores seleccionaban a sus víctimas, la mayoría menores de edad, en el interior del Metro. Desde Arganda del Rey, donde se asentaban en un local okupado, seguían a los jóvenes hasta Rivas-Vaciamadrid.
En la vía pública, a plena luz del día, se acercaban a sus víctimas con la excusa de pedirles un cigarro y les arrebataban las cadenas del cuello mediante violencia o intimidación. En uno de los casos, llegaron a propinar golpes y patadas a un menor e incluso intentaron agredirle con un arma blanca.
Los investigadores determinaron que los supuestos autores pertenecían a la banda juvenil Blood. Tras sustraer las pertenencias, preguntaban a las víctimas si estaban integradas en otro grupo juvenil.
La operación concluyó con la detención de cinco jóvenes de entre 18 y 20 años. Están acusados de delitos de robo con violencia e intimidación y lesiones con arma blanca. Una vez puestos a disposición judicial, se decretó la entrada en prisión de cuatro de ellos.