Se trata de un nuevo paso inferior de dos carriles que discurre bajo la rotonda de la Avenida de Arcentales en dirección sur
El nuevo acceso que conecta la Ciudad del Deporte y el estadio Riyadh Air Metropolitano con la M-40 abrirá al tráfico en la madrugada del viernes 26 al sábado 27 de septiembre. Es un paso inferior de dos carriles bajo la rotonda de la avenida de Arcentales en dirección sur. Con esta obra, el enclave deportivo quedará unido a la red principal de la ciudad.
El acceso dará más seguridad y fluidez al tráfico diario. Además, los vecinos de la zona contarán con más opciones de movilidad, según ha destacado el Ayuntamiento de la capital. La construcción y el desmantelamiento de dos torres de alta tensión eran parte de los compromisos del Atlético de Madrid con el Ayuntamiento. Los trabajos han estado supervisados por el Área de Obras y Equipamientos.
El club también ha creado una vía de servicio desde la M-40 norte hasta las parcelas de la Ciudad del Deporte. Este nuevo tramo desemboca en la salida 9A (avenida de Luis Aragonés) y en la salida 9B (avenida de Arcentales-Coslada). Por allí acceden hoy los vehículos que llegan a los aparcamientos del estadio. También es la principal vía de entrada a los barrios de Las Rosas y Las Musas.

Nuevo acceso M-40.
Estas actuaciones se suman a la obra ejecutada en 2017. Entonces se construyeron dos ramales de acceso desde la M-40. Esa intervención fue esencial para abrir el estadio sin saturar el tráfico en la zona.
El Consistorio destaca que todas las mejoras tendrán un fuerte impacto en la vida diaria. Además, reducirán los tiempos de llegada y salida durante los partidos y otros eventos con gran afluencia.
La Ciudad del Deporte es un proyecto público-privado entre el Ayuntamiento y el Atlético de Madrid. El objetivo es completar el tejido urbano de San Blas-Canillejas en torno al estadio. El nuevo espacio suma más de 265.000 metros cuadrados e incluirá instalaciones deportivas y de ocio. El plan tiene un enfoque sostenible e innovador. De este modo, se redefinirá la cornisa noreste de Madrid y se generará un nuevo polo de atracción con el deporte como protagonista.