El sindicato acusa a la empresa de estar amedrentando a las personas que integran su candidatura en pleno proceso electoral
La Federación de Industria de CCOO Madrid denuncia que, «en pleno proceso de presentación de candidaturas para las próximas elecciones sindicales, la empresa está llevando a cabo actuaciones de persecución y amedrentamiento hacia las personas integrantes de la candidatura» del sindicato.
CCOO afirma que «la dirección ha iniciado expedientes sancionadores, como represalia por la actividad sindical de quienes están impulsando la candidatura de CCOO en el centro de trabajo, con el objetivo de frenar la organización colectiva de las trabajadoras y los trabajadores».
El sindicato recuerda que la Panificadora de Alcalá es «una empresa histórica» de la ciudad, fundada en 1955, con dos centros de trabajo y una plantilla cercana a 550 personas, «de las cuales alrededor del 80 % son trabajadoras y trabajadores migrantes».
Desde CCOO Industria Madrid denuncian que la empresa «se está aprovechando de la vulnerabilidad laboral y del desconocimiento de derechos que afecta a una parte significativa de la plantilla, en lugar de garantizar unas condiciones laborales dignas y un clima de plena libertad sindical».
El sindicato subraya que «estas prácticas se producen en una empresa cuyo cliente principal es Mercadona y que se publicita con el lema CALIDAD SOMOS TODOS». Asimismo, considera que «la calidad empieza por el respeto a los derechos laborales y sindicales de las personas trabajadoras que hacen posible cada día la producción que llega a las tiendas».
CCOO también señala «la posición del pseudosindicato Valorian (antes FASGA), que está siendo la de respaldar tácitamente estas prácticas, en lugar de defender de forma firme la libertad sindical y los intereses reales de la plantilla».
Además, desde CCOO Industria Madrid, anuncian que seguirán «trabajando para garantizar un proceso electoral limpio, libre y sin presiones» y llaman a la plantilla de la Panificadora de Alcalá a «mantenerse unida frente al miedo y frente a cualquier intento de silenciar la representación legal de las personas trabajadoras».
Por último, Comisiones Obreras exige a la dirección de la Panificadora de Alcalá que «esté a la altura como patronal, que asuma su responsabilidad y que garantice el pleno respeto a los derechos laborales y sindicales, sin represalias contra quienes deciden organizarse y presentarse en las candidaturas de CCOO».