Nacido en Plasencia en 1962, Robe Iniesta acabó convirtiéndose en una de las voces esenciales del rock español
Robe Iniesta, voz y figura emblemática de Extremoduro, ha fallecido a los 63 años, según ha comunicado este miércoles su agencia de representación.
En la nota difundida en la web oficial, el equipo lamenta que «hoy nos toca escribir la nota de prensa más triste de nuestra vida» y se despide del artista describiéndolo como «el último gran filósofo, el último gran humanista y literato contemporáneo de lengua hispana, y al cantante cuyas melodías han conseguido estremecer a generaciones y generaciones». El comunicado no especifica la causa de la muerte.
La familia profesional del músico detallará en los próximos días el lugar en Plasencia y la hora del homenaje público que se celebrará para despedirlo.
En noviembre de 2024, Iniesta suspendió de urgencia los conciertos finales de la gira Ni Santos ni Inocentes tras ser diagnosticado de un tromboembolismo pulmonar, una dolencia que le obligó a guardar «reposo absoluto». Entonces, agradeció al público el cariño recibido y aseguró que «las ganas de volver» seguían intactas.
Nacido en Plasencia en 1962, Robe Iniesta se convirtió en referente de la música española desde la fundación de Extremoduro en 1987. Con la banda firmó once discos decisivos y letras que marcaron a varias generaciones, con hitos de la crítica como Agíla (1996) o La ley innata (2008).
Su proyecto en solitario, Robe, arrancó en 2015 con Lo que aletea en nuestras cabezas y continuó con una etapa especialmente prolífica que dejó un directo, Bienvenidos al temporal (2018), y tres álbumes posteriores: Destrozares, canciones para el final de los tiempos (2016), Mayéutica (2021) y Se nos lleva el aire (2023).
