Entró en una peluquería con un papel para despistar y acabó llevándose un teléfono móvil
El pasado sábado sobre las 11 de la mañana un hombre de unos 35 años (menos de 40) entró en la peluquería Z Peluqueros de Alcalá de Henares (ubicada en la calle Cid Campeador, al lado del Pico del Obispo) y se llevó un teléfono móvil que había en el mostrador y que es el que utilizan para atender a los clientes.
«Un chico, yo creo que era rumano por el habla, tocó el timbre, abrí la puerta para ver qué quería y entró directamente casi dándome un empujón», cuenta Tamara, la propietaria del local a MiraCorredor.tv.
La actitud ya le resultó sospechosa, pues fue directo al mostrador mirando todo lo que había a su alrededor. Además llevaba un papel rosa grande de publicidad con precios y tratamientos de otro centro de estética que a la propietaria le puso delante de sus ojos para despistarla mientras cogía el teléfono móvil.
«No me di cuenta de que se había llevado el móvil hasta que salió por la puerta, quise salir detrás pero nunca sabes cómo puede reaccionar, si te puede sacar una navaja», explica la dueña del establecimiento, que se muestra preocupada porque, según su testimonio, no es la primera vez que ocurre.
«Creo que por la zona también lo ha hecho en otro local y a una mujer que iba por la calle». En ambos casos, según Tamara, aprovechó para robar al descuido.
En ese momento había una clienta que no dudó en ponerse en la puerta al ver la actitud sospechosa del individuo por si fuera necesario avisar a alguien.
«Cuando se fue empezó a mirar una vitrina que tengo llena de productos y fue cuando le dijimos que estábamos llamando a la Policía y se fue».
El robo ha sido denunciado en comisaría, pero más allá de eso, lo que quiere transmitir la propietaria del centro es que los comerciantes de la zona estén alerta por si vuelve a actuar.
«Yo creo que tenía otras intenciones, de llevarse algo más. De la forma que pasó es una persona que va a robarte».
Se trata de un hombre de unos 35 años, no muy alto (1.70 como mucho), de complexión gruesa, la piel morena y las cejas muy pobladas.