La alcaldesa y el obispo complutense han colocado una cápsula del tiempo en este espacio emblemático, donde ya han comenzado las obras
La alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet, y el obispo complutense, Antonio Prieto Lucena, han participado este lunes en la colocación de una cápsula del tiempo en la Plaza de los Santos Niños, coincidiendo con el inicio de las obras de remodelación y adecuación de este emblemático espacio urbano.

Imágenes: Ayto. de Alcalá.
El proyecto, que cuenta con una inversión de un millón de euros y un plazo de ejecución de once meses, permitirá recuperar la esencia histórica de la plaza y reforzar su papel como punto neurálgico del centro histórico, tanto en su dimensión monumental como ciudadana.
Judith Piquet ha señalado que «hoy damos el primer paso en el camino hacia la ansiada remodelación de la Plaza de los Santos Niños, un espacio urbano único en la historia, en el patrimonio y en la espiritualidad de nuestra ciudad». La alcaldesa ha destacado que esta intervención «sirve para saldar una larga deuda pendiente con esta plaza tan querida y tan importante para Alcalá, dentro de nuestro plan integral de regeneración del Centro Histórico».
Además, ha agradecido al obispo «la ayuda y la colaboración que nos está prestando para llegar hasta este momento en el que presentamos las obras que le van a dar el realce, el valor y la categoría a esta plaza que es el centro de nuestra ciudad, porque estamos, literalmente, sobre la primera piedra que construyó la Alcalá del presente».
Situada frente a la Catedral Magistral de los Santos Justo y Pastor, la Plaza de los Santos Niños constituye uno de los espacios públicos con mayor carga simbólica e histórica de Alcalá. En su entorno confluyen algunas de las principales vías peatonales del casco histórico y es un lugar de referencia para vecinos y visitantes, además de ser escenario de eventos culturales y religiosos a lo largo del año.
El proyecto de remodelación contempla la renovación integral de los pavimentos interiores con piedra natural, la mejora de la accesibilidad universal y la sustitución del alumbrado por sistemas más eficientes, con el objetivo de reducir el impacto visual y avanzar en sostenibilidad energética. También se crearán nuevas zonas estanciales bajo el arbolado existente, se plantarán nuevos ejemplares y se reforzará el carácter amable y acogedor del entorno.
Otro de los objetivos principales es recuperar el carácter abierto de la plaza como espacio de contemplación de la Catedral Magistral. Además, se pondrán en valor los hallazgos arqueológicos descubiertos durante las excavaciones de 2022, cuyos restos murarios serán reproducidos en el nuevo pavimento mediante pletinas metálicas, acompañadas de señalética explicativa para facilitar su interpretación.
El proyecto incluye también la instalación de una escultura en bronce del Emperador Fernando I de Habsburgo, nacido en Alcalá en 1503, y el traslado del astrolabio de la plaza al barrio de La Garena.
Durante el acto, se depositó una cápsula del tiempo que permanecerá enterrada en la zona poniente de la plaza. En su interior se han introducido objetos que representan la historia y el presente de la ciudad: un ejemplar del periódico local Puerta Madrid, monedas de curso legal, fragmentos de cerámica de distintas épocas, facsímiles del Fuero Viejo (1235) y del Fuero Nuevo (1509), una reproducción del título de Ciudad otorgado por Carlos II en 1687, un sello de Correos conmemorativo, documentos del Obispado y del Ayuntamiento, así como medallas de los Santos Niños y del Consistorio complutense.