La EMA aprueba la vacunación para este grupo de edad, una inyección que se administrará en dos dosis
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) ha respaldado este jueves la extensión de la actual licencia europea de las farmacéuticas Pfizer y BioNTech para el uso de su vacuna contra la Covid-19 en niños de entre 5 y 11 años, aunque con una dosis menor que la utilizada en mayores de 12 años.
La inyección se administrará en dos dosis, con un intervalo de tres semanas entre la primera y la segunda, subraya la agencia en un comunicado, en el que señala que los beneficios de vacunar con Pfizer a los niños en esa franja de edad supera los riesgos.
Los efectos secundarios más comunes detectados en los ensayos clínicos fueron similares a los de los mayores de 12 años, lo que incluye cansancio, dolor muscular y de cabeza, escalofríos, molestias y enrojecimiento en el lugar de la inyección.
El primer país en autorizar el uso del suero de Pfizer en menores de entre 5 y 11 años fue Estados Unidos el pasado 29 de octubre tras validar su eficacia y seguridad. Según la FDA estadounidense, la respuesta inmune obtuvo un 90,7% de efectividad en la prevención del Covid-19.
La decisión de la EMA, que da vía libre a los países europeos, entre ellos España, para iniciar la vacunación en este grupo de edad, llega después de que el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), haya recomendado administrar una dosis de refuerzo a todos los adultos.
El ECDC ha alertado, además, del «muy alto riesgo» por covid en las próximas semanas. «Los países deberían considerar una dosis de refuerzo para todos los adultos de más de 18 años, con prioridad para las personas mayores de 40 años» ha indicado en una nota.
Asimismo, ha señalado que la rápida implementación de las campañas de vacunación «han evitado muertes» y «reducido las hospitalizaciones», pero aún así todavía existen grupos de población en los que la protección es «menor de lo deseado».
De cara al invierno, la entidad ha alertado de que se producirá un mayor número de ingresos hospitalarios de personas sin vacunar, en particular de grupos de riesgo, por lo que la tasa actual de vacunación «será insuficiente» para evitar la sobrecarga de los sistemas sanitarios.