El alcalde ha defendido los valores de la Segunda República y la figura de Azaña
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha estado este jueves en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares para participar en el acto de conmemoración del 80 aniversario del fallecimiento de Manuel Azaña.
El alcalde complutense, Javier Rodríguez Palacios, ha recibido a la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, quien ha saludado al equipo de Gobierno y ha firmado en el libro de honor de la ciudad.
El acto, enmarcado dentro de la programación de las XI Jornadas Azaña, organizadas por el Foro del Henares, con el apoyo y colaboración de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática del Ministerio de la Presidencia, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, la Universidad de Alcalá, la Fundación General de la Universidad de Alcalá y la Fundación Francisco Largo Caballero, ha tenido lugar en el Salón de Plenos Municipal y ha contado con la participación de Ángeles Egido León, catedrática de Historia Contemporánea de la UNED, además de la sobrina nieta del político, María José Navarro Azaña.
Carmen Calvo ha agradecido al Ayuntamiento complutense su compromiso por acoger un acto que es «un deber, porque recordar a Manuel Azaña es una obligación».
Por su parte el alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, ha afirmado sentirse «muy orgulloso de acoger este acto para reivindicar un político clave en nuestra historia como es Manuel Azaña, hijo de esta ciudad y cuya figura está por encima de la política partidista».
Rodríguez Palacios ha ensalzado la figura de Manuel Azaña, «un apasionado por la palabra», y ha reivindicado la necesidad de «recordar la historia con actos como el de hoy para combatir la mentira y las injurias contra su figura».
El primer edil ha señalado además que «hoy tenemos muy presentes valores que marcaron la Segunda República, entre ellos la importancia de defender la cultura como motor contra las dictaduras; los valores de la democracia son patrimonio de quienes quieran sumarse a ese proyecto. Tenemos mucho que aprender de su figura, no para celebrar un pasado sino para diseñar un mejor futuro para nuestra sociedad».
Rodríguez Palacios ha concluido destacando la necesidad de «establecer una Fundación que recuerde su figura y sirva como foro de diálogo en nuestra ciudad».