La reapertura supone el primer paso hacia la normalización del servicio, tras el corte por obras iniciado el pasado 2 de julio
Mañana, 31 de julio, se retoma el servicio de la línea C-5 entre las estaciones de Embajadores y Villaverde Alto de Cercanías Madrid.
La reapertura de este tramo marca el primer paso hacia la normalización del servicio, tras el corte parcial de la circulación que comenzó el pasado 2 de julio, que corresponde a una de las fases de las obras de mejora que Adif está llevando a cabo en la estación de Atocha Cercanías.
Durante este tiempo, Renfe ha habilitado trenes de reserva en la estación de Villaverde Alto, por la que también pasan trenes de la línea C-4, destinados a atender incrementos en la afluencia de viajeros, así como a responder de manera eficaz ante las posibles incidencias operativas.
Asimismo, el personal de atención al cliente en las estaciones afectadas informó a los viajeros de las alternativas de transporte público existentes. Los viajeros con un título de transporte válido de Cercanías pudieron utilizar sin coste adicional las líneas EMT correspondientes.
Dicha fase de las obras forma parte del conjunto de actuaciones que Adif está desarrollando en Atocha Cercanías. Finalizarán en 2026 y permitirán ampliar la capacidad del túnel de Sol en un 33 %, facilitar la gestión de incidencias, mejorar los tiempos de viaje y aumentar la fiabilidad del servicio en un 50 %, especialmente en las líneas C-3 y C-4. Estas obras están incluidas en el Plan de Cercanías Madrid y suponen una inversión de 54 millones de euros.
El proyecto incrementará la capacidad de las líneas que pasan por el túnel de Sol, que contarán con una vía adicional. También se ampliará el andén 5, que da servicio a las vías 9 y 10, para mejorar la subida y bajada de viajeros de la línea C-5.
Estos trabajos estaban inicialmente previstos para enero, pero debido a las obras de soterramiento de la A-5 y al refuerzo de la línea C-5, se acordó con el Ayuntamiento de Madrid y el CRTM posponerlos al verano, cuando la demanda de transporte es menor.
Hasta ahora, las obras, iniciadas el pasado año, se han desarrollado sin afectar al tráfico ferroviario.
El segundo corte, que afecta al túnel de Sol por el que circulan las líneas C-3 y C-4, comenzó el 19 de julio y se mantendrá hasta el 30 de agosto. Durante este periodo, el tráfico ferroviario está interrumpido entre Chamartín y Atocha, y la estación de Sol permanece cerrada.
Las líneas C-2, C-7, C-8 y C-10, que operan por el túnel de Recoletos, mantienen su servicio habitual. Esto permite a los viajeros realizar transbordos entre Chamartín y Atocha con normalidad.
Estas actuaciones se enmarcan en el Plan de Cercanías Madrid, que acumula una inversión de más de 1.700 millones de euros desde 2018, de los cuales más de 87 millones se destinan a estaciones y aparcamientos.
La nueva configuración de vías se distribuirá en esquema 4+4+2: cuatro vías para el túnel de Recoletos, cuatro para el de Sol y dos para el de Embajadores, frente al actual 4+3+3. Esto permitirá mejorar la asignación y operatividad de toda la red, ha informado Renfe.