El pequeño tan solo tenía 11 años
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a prisión permanente revisable a Mounir A., de origen marroquí, por asesinar a su pareja, Raquel, y al hijo de ésta, Malik, naturales de Eibar (Guipúzcoa), en el domicilio de la calle Dos de Mayo en el que convivían en Alcobendas.
Los hechos ocurrieron en la tarde-noche del 2 de mayo de 2017 cuando, según la sentencia, se produjo una discusión entre ambos. Mounir, «al no aceptar los reproches que ella le hizo por su comportamiento» y «con ánimo de acabar con la vida de Raquel», de 45 años, «portando un cuchillo en la mano, accedió al cuarto de baño donde se encontraba la mujer y de forma sorpresiva le asestó 30 puñaladas por todo el cuerpo».
Al percatarse el condenado de la presencia en la casa del hijo de ésta, de todavía no había cumplido los 12 años de edad, «le atacó por la espalda, le asestó 16 puñaladas en diversas partes del cuerpo y le colocó un fular alrededor del cuello para acelerar y asegurar su muerte».
Después abandonó la vivienda, confesó el crimen a sus familiares por teléfono y huyó a Francia, hasta que fue detenido el 30 de mayo de 2017 en un parque de Madrid.
El tribunal, tras el veredicto de culpabilidad del jurado, impone al acusado una pena de prisión permanente revisable por el asesinato del pequeño y otra de 25 años de prisión por el de la mujer, en el segundo caso con la circunstancia agravante de cometerlo por razones de género y en ambos con la de parentesco.
Además, la sentencia le obliga a indemnizar a los otros dos hijos de Raquel con 180.000 euros a cada uno y a los padres de ella con 120.000 a cada uno.
El hombre, de 38 años, se encontraba en situación irregular en España y tenía antecedentes penales, aunque en este caso no existían denuncias previas ni orden de alejamiento por malos tratos.