El Ejército ha desinfectado ya la residencia Francisco de Vitoria
Dos ancianos con diversas patologías han fallecido por coronavirus en la residencia Orpea de Meco donde una tercera persona también ha dado positivo.
Además, otros cinco trabajadores tienen síntomas, por lo que ya no han ido a trabajar, han indicado a Europa Press fuentes del Grupo Orpea.
Por ello, se ha procedido al aislamiento de los residentes del centro, tal y como marca el protocolo de actuación. Desde la residencia aseguran que en este momento cuentan con medios suficientes, pero que podrían verse desbordados si aumentan los contagios.
Por otro lado, se ha detectado otro foco de contagio en la residencia Francisco de Vitoria de Alcalá de Henares, donde habría una veintena de personas mayores infectadas de COVID-19, según han contado trabajadores del centro a la misma agencia de noticias.
Esta residencia ha sido la primera de la Comunidad de Madrid que ha sido desinfectada por el Ejército.
Residencias de Madrid, Barajas, Moratalaz y Morata se han visto también afectadas en los últimos días por brotes de coronavirus.
Además, en una residencia de Chamartín, se han producido 11 muertes, cinco de ellas confirmadas por coronavirus, y este viernes se contabilizabóan 34 infectados, según publicaba El País.
En varios de estos casos los familiares de internos han denunciado la falta de medios. La Comunidad de Madrid, por su parte, ya ha reforzado la inspección de los centros públicos y privados para garantizar la correcta asistencia de los ancianos, el cumplimiento de los planes de prevención y la comunicación a familiares.
CCOO exige la intervención urgente del Estado en las residencias privadas de la Comunidad de Madrid
A raíz de los numerosos casos de muertes y contagios en residencias de mayores, el sindicato Comisiones Obreras ha exigido al Gobierno central que intervega «inmediatamente y sin más excusas, ante uno de los principales y dramáticos focos de contagio en la región más afectada por la propagación del virus».
Para CCOO las residencias de personas mayores de la Comunidad de Madrid «se deben convertir en prioridad sanitaria, con el fin de contener urgentemente la expansión del COVID-19 en un colectivo especialmente vulnerable, como el de las personas mayores y dependientes».
Según CCOO, «estas residencias parten de una situación de precariedad estructural que se manifiesta especialmente en las plantillas. Sobrecarga laboral, incumplimientos de ratios, pobreza salarial, son el común denominador en una red pública que se gestiona de forma privada en más de un 70% de las plazas».
En opinión del secretario general de CCOO de Madrid, Jaime Cedrún, el modelo de atención residencial «no se ha adaptado al perfil actual de las personas usuarias que son, en su mayoría, grandes dependientes que requieren de cuidados de atención intensiva. Ni se han adaptado los protocolos, ni la organización, ni el funcionamiento, ni mucho menos reforzado las plantillas y ahora pagamos las consecuencias».
Para Comisiones, «la falta de medidas de seguridad es ya un hecho insostenible que sitúa a las plantillas de estos centros en riesgo grave y en vehículo transmisor del virus».
El sindicato denuncia que «las bajas de trabajadoras contagiadas no son repuestas, no hay gente disponible, el agotamiento físico y mental es extremo junto a la imposibilidad de cubrir mínimamente las necesidades de los residentes, y los centros que se medicalizan carecen de los refuerzos sanitarios y asistenciales. Por otra parte, la incapacidad de las empresas para dar respuestas firmes, viables y eficaces alimentan este escenario crítico».
CCOO considera que «estamos ante una situación excepcional y es imprescindible desarrollar medidas extraordinarias. Ya no valen soluciones discrecionales y dispersas en manos privadas cuando, además, las posibilidades de gobierno, control e inspección por parte de la Consejería de Políticas Sociales se han demostrado claramente limitadas y mermadas, tras años de recortes y desatención en esta materia».
Para Cedrún, «hay que pasar a otra fase más directa, de un único mando y de articulación de medidas definitivas que frenen esta sangría que pone en peligro la vida de los residentes y de las personas trabajadoras en estos centros de trabajo».