Estarán a cargo de ONGs y podrían regresar al centro cuando pase la crisis sanitaria
El Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche, en Madrid, se ha ido vaciando en los últimos días del estado de alarma por temor a que el coronavirus se expanda entre la población reclusa, que normalmente se encuentra en condiciones de hacinamiento.
Lo mismo ha ocurrido en otros centros similares de otras partes del país por la crisis sanitaria. En el caso de Aluche el centro se cerrará temporalmente y solo quedará una pequeña vigilancia, destinándose los agentes a otras áreas de atención de la crisis.
La decisión ha sido tomada por la Dirección Adjunta Operativa de la Policía Nacional, después de que se hayan suspendido todos los vuelos de repatriación, se hayan aplazado todos los plazos administrativos (también los de expulsión) y no se conozca todavía cuándo terminará la crisis sanitaria ni el estado de alarma.
Por ello, han procedido a liberar a los extranjeros y les han puesto a disposición de casas de ONGs, amigos y familiares cercanos controlando la dirección en la que permanecerán durante el estado de alarma. Cuando termine, los reclamarán para formalizar la expulsión decretada, por lo que podrían volver temporalmente al CIE, según ha publicado Telemadrid.