Desde su domicilio, una pareja organizaba el suministro de diversas sustancias estupefacientes, utilizando para ello a adolescentes del barrio como repartidores
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un punto de venta de sustancia estupefaciente que recurría a menores de edad en patinete eléctrico para distribuirla en el distrito madrileño de Ciudad Lineal. Desde su domicilio, una pareja –compuesta por un varón y una mujer menor de edad– planificaba la distribución de diversas sustancias estupefacientes, utilizando para ello a adolescentes del barrio como repartidores.
Cuatro de estos menores han sido detenidos por ejercer como distribuidores bajo las órdenes de la pareja, llegando incluso a realizarle tareas domésticas como pasear a sus perros a cambio de una dosis de droga. A tres de los seis arrestados se les considera también responsables de un delito de receptación de teléfonos móviles y patinetes eléctricos que previamente habían sido sustraídos.
La investigación arrancó el pasado mes de abril tras detectarse un gran trasiego de personas en torno a un domicilio del distrito de Ciudad Lineal. Los agentes consiguieron localizar una vivienda próxima como foco principal de la compraventa de droga, comprobando que allí residían una pareja –compuesta por un varón y una mujer menor de edad– y que era frecuentada por numerosos adolescentes del barrio.
Los avances en la investigación arrojaron que la pareja antes mencionada se dedicaba a la venta estupefaciente, fundamentalmente hachís y marihuana, en el interior del propio domicilio. Sin embargo, para distribuirla a otros puntos del distrito, recurría a menores de edad del barrio para evitar el riesgo de ser interceptados portando la droga. Estos menores la suministraban en un callejón anejo al inmueble o se desplazaban utilizando patinetes eléctricos o a pie, al encuentro de clientes.
A cambio de sus servicios, el varón mayor de edad que residía en esta vivienda recompensaba a los menores con sustancia estupefaciente, promoviendo el consumo por parte de los menores y dejando constancia de estas transacciones con anotaciones manuscritas. Asimismo, para obtener sus dosis, los adolescentes realizaban labores domésticas por encargo de esta pareja, como pasear a sus perros o hacerle la compra en establecimientos comerciales.
Las actuaciones policiales posteriores llevaron a ampliar la investigación inicial, uniéndose al tráfico de drogas averiguaciones para determinar si estos jóvenes también eran responsables de un delito de receptación, concretamente de dispositivos móviles y patinetes eléctricos previamente sustraídos. Tras acreditar este extremo, los agentes realizaron una entrada y registro en la vivienda mencionada el pasado mes de junio y procedieron a la detención de estos seis jóvenes –un mayor de edad y cinco menores–, pasando a disposición de la autoridad judicial y de la Fiscalía de Menores.
En el registro realizado en la vivienda se intervino abundante sustancia estupefaciente, concretamente 2.300 gramos de hachís, 440 gramos de marihuana, 25 gramos de cocaína y 190 pastillas de drogas sintéticas, entre otras. Además, se aprehendieron 46 teléfonos móviles, cuatro tablets, cuatro patinetes eléctri- cos, diversas armas blancas, útiles para la preparación de la droga, cuadernos manuscritos y 600 euros en efectivo.