Se han localizado 830 metros cúbicos en tres puntos en Valdemoro y unos 8 metros cúbicos en dos puntos de Vicálvaro
Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) han detenido al administrador de la empresa que estaría deshaciéndose de mascarillas caducadas en vertidos ilegales en Valdemoro y Vicálvaro.
Las investigaciones comenzaron el 10 de mayo, cuando la Policía Local de Valdemoro emitió un informe sobre un vertido ilegal en tres puntos de la localidad, en el cual se encontraban numerosos envases de mascarillas quirúrgicas y FFP2 caducadas, sin usar y numeradas por lotes.
Además, la Policía Local de la localidad de Pinto, al día siguiente, emitió otro informe sobre la identificación del conductor de una furgoneta que se encontraría trasladando ingente cantidad de mascarillas sin usar en su interior y que se corresponderían con la numeración de los lotes de Valdemoro.
También, el 15 de mayo, la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal de Madrid, emitió un informe sobre la localización de dos puntos más en el distrito madrileño de Vicálvaro coincidentes con la numeración de los lotes que se localizaron en Valdemoro.
Contenedores marítimos donde ocultar la mercancía
Una vez realizadas las gestiones por los investigadores, se pudo constatar documentalmente que una empresa madrileña habría adquirido de otras dos empresas importadoras, una de Madrid y otra de Logroño, más de seis millones de mascarillas sin acreditar la venta o cualquier otro destino final.
Tras las respectivas inspecciones realizadas, se inmovilizaron 4.173.502 mascarillas y 123.500 test rápidos de antígenos en una nave en Illescas (Toledo) coincidentes con los números de lote de las mascarillas localizados en Valdemoro y Vicálvaro.
No obstante, los agentes llegaron a localizar diferentes contenedores marítimos ubicados en una finca en la localidad de Pinto, en el cual almacenaban todos los envases de mascarillas caducadas para posteriormente ser depositadas en los vertidos ilegales en Valdemoro y Vicálvaro.
De esta manera, el autor de los hechos se ahorraba la cantidad económica de almacenamiento de las mascarillas caducadas o la gestión de la forma legal y correcta del depósito de residuos, ha informado este miércoles la Guardia Civil.
Finalmente, la operación policial se ha saldado con la detención del administrador mercantil de la empresa y la investigación del conductor de la furgoneta que trasladaba las mascarillas desde los contenedores a los diferentes vertidos.
Se le imputa a cada uno un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente por los vertidos, así como por el riesgo de incendio que se podría haber ocasionado, han indicado las mismas fuentes.