Los Estadísticos del Estado critican las maniobras del Gobierno que, en su opinión, ponen «en riesgo el elevado crédito del que goza en estos momentos la estadística oficial de España»
El presidente del Instituto Nacional de Estadística (INE) Juan Rodríguez Poo ha presentado la noche de este lunes su dimisión al Gobierno, según ha adelantado el diario ABC y han confirmado a Efe de fuentes de este organismo.
La dimision se produce después de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acusara al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de hacer una «huida hacia delante», intentando controlar organismos como Indra, el INE, o el Tribunal Constitucional.
Según un comunicado emitido esta pasada noche por la Secretaría de Comunicación del Ministerio de Asuntos Económicos, la dimisión se circunscribe en un «refuerzo del sistema estadístico estatal con una reforma legal y un nuevo estatuto para el INE».
«Las reformas impulsadas por el Gobierno para reforzar y modernizar el Sistema Estadístico estatal han alcanzado un hito fundamental con la aprobación en el Parlamento de una modificación de la Ley de la Función Estadística Pública», señala el Ejecutivo.
El comunicado incide en que Rodríguez Poo ha sido el principal impulsor de ese proceso de transformación desde que fue combrado en 2018. Su dimisión se produce «por motivos personales», dice la nota, según la cual se espera nombrar a un sustituto en las próximas semanas.
Fuentes internas del INE detallan a ABC que la salida se produce tras «las críticas del Gobierno a las cifras de estadísticas oficiales como el IPC o el PIB», que según el Ejecutivo no han venido reflejando de manera fiel la situación de la economía.
La Asociación de Estadísticos Superiores del Estado (Aese) critica que el cese «podría ser interpretado por la sociedad como un ataque a la independencia del instituto», motivado por el hecho de que «las cifras publicadas por el INE de algunas estadísticas relevantes no están en sintonía con las previsiones económicas del Gobierno».
La asociación recuerda que desde la aprobación en el año 1989 de la Ley de la Función Estadística Pública, hace más de 30 años, «ningún presidente del INE fue cesado sin mediar un cambio de Gobierno».
«Lo que supone una novedad sin precedentes»., continúa el comunicado, «es que desde el propio Gobierno y, en particular, desde el Ministerio de Asuntos Económicos se cuestionen las cifras de estadísticas del INE tan relevantes como el IPC o el PIB».
Los Estadísticos del Estado critican las maniobras del Gobierno que, en su opinión, ponen «en riesgo el elevado crédito del que goza en estos momentos la estadística oficial de España», tanto ante la Unión Europea como ante los propios usuarios.