El Gobierno condena los actos violentos y asegura que ha movilizado más de 15.000 agentes para reprimir a los piquetes
La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha asegurado sobe la huelga de transportes que hay reacciones «orientadas» por los posicionamientos de «la ultraderecha» con acciones minoritarias de transportistas que están «boicoteando» al resto de trabajadores y del sector que intentan garantizar los alimentos de primera necesidad.
«Lo que estamos viendo son actos violentos que impiden que otros trabajadores puedan ejercer su derecho a trabajar y que, además, lo hacen de forma irresponsable, ya que en este momento esas acciones no sólo están generando la inseguridad de los transportistas que sí quieren trabajar, sino que en algunos casos están dando como consecuencia quedarnos desabastecidos», ha dicho en un acto del PSOE en Sevilla.
Rodríguez ha apuntado que «hay que manifestarse claramente y rechazar esa actitud violenta de una minoría que quiere empañarlo como si fuera un acto del ejercicio del derecho de huelga, cuando es un boicot en toda regla alentado desde el odio y las posiciones de extrema derecha, que en nada favorecen a afrontar con fortaleza un momento de tanta dificultad como el actual».
Posteriormente la ministra, en otro acto, ha señalado que el Gobierno «no está dispuesto a aceptar chantajes». «No vamos a aceptar que la violencia se instale en nuestras calles, y vamos a responder con toda la fuerza del Estado ante aquellos que con la excusa de una huelga estén haciendo un boicot a España, tanto para los transportistas que quieren trabajar como para los consumidores», ha añadido.
Además, ha defendido que «el derecho de huelga, que es legítimo, no puede ser un impedimento para que otros puedan ejercer su derecho a trabajar». «Y mucho menos puede ser que desde la fuerza, la violencia, se quiera condicionar a aquellos que quieren trabajar». En este sentido, ha indicado que las Fuerzas de Seguridad del Estado «ya están actuando para proteger a aquellos que quieren trabajar».
En términos muy similares se ha expresado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, quien ha dicho que «no podemos permitir que sometan a ese país a un pulso que no vamos a tolerar, estamos trabajando con el Ministerio de Interior y hemos movilizado más de 15.000 agentes para reprimir estas actuaciones violentas que no representan al sector».
«Somos sensibles pero no vamos a ceder a este chantaje, sabotaje y boicot», ha explicado. La titular de Transportes ha señalado que el paro «minoritario» que comenzó el pasado lunes responde a «un grupo de ultras que están intentando someter a este país a un chantaje y sustituyendo la palabra por palos, clavos y piedras» y que «estos grupos están apoyados por la ultraderecha».
El Ejecutivo ha vuelto a decir hoy que en el Consejo de Ministros del 29 de marzo se abordarán acciones concretas que harán bajar el precio de los carburantes, la electricidad y del gas para la familias y los sectores más afectados y ha avanzado que además de las reuniones con los partidos, los sindicatos y empresarios, se reunirá el próximo lunes con las comunidades autónomas.