El servicio de Neurología ha creado un espacio de reunión con cuidadores y pacientes para el aprendizaje y la mejora de su día a día
El Hospital Universitario de Torrejón ha finalizado esta semana su II edición de la Escuela de Pacientes afectados con demencia, enmarcada en el programa Salud responsable del centro. El servicio de Neurología ha emprendido este proyecto con el objetivo fomentar y promover la educación del paciente, de sus familiares y cuidadores para poder afrontar su enfermedad. Además, se convierte en un espacio donde conectar con otras personas en la misma situación y recibir consejos útiles para que el día a día sea más sencillo.
En el ámbito de las alteraciones cognitivas la formación es especialmente importante. Por este motivo, la escuela aborda, en distintas sesiones, dos procesos muy distintos para empoderar a los ciudadanos a través de la información. Por un lado, se centra en personas con demencias y sus familias para ayudarles en el manejo de los trastornos de conducta. Por otra parte, se realizan formaciones con pacientes que acuden a consulta con quejas cognitivas, que han sido valorados y se han descartado enfermedades degenerativas. En este último caso, la escuela les ayuda a comprender y afrontar el envejecimiento para aplicar estrategias que les sirvan para mantener la salud cerebral.
El servicio de Neurología ha liderado esta iniciativa para abordar aquellas formaciones, charlas y conversaciones que fuera del contexto de una escuela de pacientes sería imposible tratar porque no hay tiempo material para dar toda esta información. «Gracias a esta iniciativa nos acercamos a las personas y permitimos que salgan a la luz inquietudes que en consulta no se verbalizan y, por tanto, no se atienden», explican Miriam Eimil y Pilar Alcántara, neurólogas del Hospital Universitario de Torrejón y coordinadoras de la Escuela de Pacientes.
«Esta segunda edición supone un éxito para el servicio de Neurología, ya que podemos seguir abriendo un nuevo camino de la mano de nuestros pacientes y sus familias», señala la Dra. Pilar Alcántara.
Herramientas para convivir con la demencia
La demencia es un conjunto de enfermedades que produce una profunda alteración en la vida de las personas que la padecen y en su entorno, llevando en muchas ocasiones a situaciones difíciles de gestionar. Las estimaciones apuntan a que la demencia irá en aumento en nuestra sociedad, llegando a afectar para 2060 a cuatro de cada 100 españoles, más del doble de las personas que la padecían en 2018.
Desafortunadamente, en la actualidad no existen tratamientos que puedan curar la demencia. Por ello, es de gran importancia ofrecer herramientas para prevenirla, retrasar su aparición y ralentizar su evolución.
«Las personas encargadas de cuidar y atender a los afectados suelen necesitar ayuda y conocimientos para poder afrontar la situación y mejorar la calidad de vida de los pacientes, ya que esta enfermedad supone un cambio muy importante en los pacientes y todo su entorno, al afectar a las actividades cotidianas», afirma la Dra. Miriam Eimil.
Cómo afecta el envejecimiento cerebral al funcionamiento diario
Durante las sesiones de la Escuela de Pacientes se abordaron las quejas cognitivas derivadas del proceso de envejecimiento cerebral. Con el paso del tiempo, el cerebro se vuelve más lento, más rígido e inatento. «En consulta hemos detectado que existe una tendencia a magnificar la reacción ante los errores normales, considerándolos premonitorios de la enfermedad de Alzheimer. Un exceso de preocupación puede generar un estado mental que acabe afectando también a las propias funciones cognitivas. Es importantísimo explicar los mecanismos con los que funciona nuestro cerebro y las limitaciones naturales que tenemos», explica la Dra. Pilar.
«Los despistes son preocupantes si los demás los notan y si significa que empezamos a hacer mal cosas que antes hacíamos bien. Ese debe ser el momento para acudir a consulta para que se analice caso por caso. La detección precoz del Alzheimer es fundamental», añade Miriam Eimil.
Además de explicar todos estos factores, se analizaron las mejores estrategias para combatir, de algún modo, los efectos del envejecimiento cerebral y posponer el inicio de enfermedades degenerativas como el Alzheimer. El servicio de Neurología del Hospital Universitario de Torrejón marca como factores claves el ejercicio físico moderado-intenso, una dieta sana estilo mediterráneo y otras llamadas MIND o DASH, tener un sueño reparador, la relajación y el mindfulness, la estimulación cognitiva y la socialización.