El joven detenido dio positivo en las pruebas de alcohol y drogas
El kamikaze de 23 años que mató a un joven de 32 el pasado domingo en la A-5, a la altura de Móstoles, circulaba en sentido contrario para saltarse un control de alcoholemia de la Guardia Civil, según publica este miércoles el diario El Mundo. La víctima, que tiene una hija de tres años, regresaba a su pueblo, Casarrubios del Monte, después de dejar a su mujer en el trabajo.
El joven, que fue detenido tras el suceso, dio positivo en las pruebas de alcohol y drogas, al parecer por consumo de hachís o marihuana.
Tras pasar a disposición judicial, fue enviado a prisión provisional, comunicada y sin fianza acusado, inicialmente, de un delito de homicidio doloso y de dos contra la seguridad vial. También se investiga si incurrió en un exceso de velocidad.
La Comunidad de Madrid quería personarse también en la causa de este suceso como anunció que haría en el caso del kamikaze de la M-50, que mató a un joven de 20 años vecino de Rivas, pero este martes el vicepresidente autonómico, Ignacio Aguado, ha señalado que no podrá hacerlo en ninguno de los dos casos porque para ello haría falta un cambio en la ley que no se ha producido.
