El líder de Podemos considera la subida de impuestos una línea roja en la negociación para formar gobierno en Madrid
El líder de Podemos y candidato de su partido en las elecciones del próximo 4 de mayo en la Comunidad de Madrid ha advertido al PSOE de que «no van a tragar» ante la intención de los socialistas de no acometer una reforma fiscal que incremente los impuestos a las rentas más altas, sin especificar cuáles son esas rentas.
Iglesias ha reivindicado este viernes en un acto en Usera que solo la firmeza de su partido conseguirá que el PSOE opte por el «camino correcto» en lugar del «fácil», pues es la única vía de movilización para «mandar a la oposición» a la derecha «corrupta» y «al fascismo».
El líder de la formación morada ha estado acompañado de la ministra de Igualdad Irene Montero, el cofundador de Podemos, Juan Carlos Monedero, y varios miembros de su candidatura como Sol Sánchez, Vanessa Lillo, Serigne Mbaye y Carolina Alonso.
«¿Pensáis que vamos a tragar con que no haya reforma fiscal en Madrid?, ha lanzado a los asistentes. «Sabemos que para llegar a acuerdos es necesario ser firmes», ha insistido Iglesias, dejando clara su intención de subir impuestos si llega al Gobierno madrileño.
Por su parte el candidato socialista, Ángel Gabilondo, ha mantenido durante la campaña que no tocará los impuestos en dos años si llega a ser presidente y que nadie «pagará ni un euro más», unas palabras que han sido cuestionadas por PP, Ciudadanos y Vox.
Ayuso, Bal y Monasterio no se creen la promesa del candidato socialista después de que la ministra de Hacienda, la socialista María Jesús Montero, dijera que espera que las subidas de Sociedades, Patrimonio y Sucesiones y Donaciones puedan entrar en vigor el próximo año.
De impuestos va precisamente la recta final de la campaña. La presidenta madrileña y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, ha lanzado una calculadora para comparar lo que se paga en Madrid con lo que se paga en las comunidades donde gobierna el PSOE.
Ayuso ha acusado a la izquierda de querer convertir la Comunidad de Madrid en «un infierno fiscal» y se ha reafirmado en su compromiso de ejecutar «la mayor bajada de impuestos de la historia de la Comunidad de Madrid» frente a las subidas de la izquierda que «no solo pagan los ricos».