No cumplían la normativa sanitaria y tenían como destino su venta en el mercado negro
La Guardia Civil ha incautado alrededor de 3.500 kilos de níscalos en los últimos días en varios municipios de la provincia de Guadalajara, níscalos que no cumplían la normativa sanitaria y tenían como destino su venta en el mercado negro, según publica El Heraldo del Henares.
Por una lado, el jueves 31 de octubre se produjo el decomiso de 49 cajas de níscalos con un peso total de 230 kilos. Tuvo lugar en la carretera regional CM-1006 a la altura de Cantalojas y fue denunciada una persona e identificadas nueve más.
Por otro lado, el viernes 1 de noviembre, agentes de la Benemérita incautaron un total de 1.800 kilos de níscalos en Torre del Burgo.
Como en casos anteriores, los níscalos eran transportados sin ningún tipo de garantía sanitaria. Se da la circunstancia de que en este caso los agentes identificaron al posible comprador de la mercancía con fin de revenderla posteriormente, sin pasar por ningún tipo de control sanitario ni fiscal.
Días antes de estos hechos se han producido varias intervenciones más de este tipo en carreteras de la provincia con la incautación total de más de 1.400 kilos de níscalos recogidos de forma ilegal para su posterior venta en el mercado negro.
En total, en apenas diez días, la Guardia Civil ha incautado alrededor de 3.500 kilos de níscalos recolectados de forma ilegal, sin garantías sanitarias y con destino al mercado negro.
En la mayoría de los casos, se trata de grupos organizados, mayoritariamente de ciudadanos de países del este, que en ocasiones utilizan la violencia para expulsar a los vecinos y visitantes que de forma regularizada y respetuosa con el medio ambiente acuden a los bosques en busca de unas pocas setas.
En Castilla La Mancha, la recogida de níscalos está completamente regulada, por lo que es necesario disponer de un permiso para recolectar un máximo de 5 kilos por persona y día.