Fue interceptado a la altura del kilómetro 100 cuando circulaba de forma errática, poniendo en peligro a otros vehículos
La Guardia Civil de Guadalajara ha imputado al conductor de un camión articulado un delito contra la seguridad vial. El hombre conducía bajo los efectos del alcohol por la Autovía A-2, según ha informado este martes el instituto armado.
Una patrulla del Subsector de Tráfico lo detectó a la altura del kilómetro 100. En ese punto, circulaba de forma errática y peligrosa, poniendo en riesgo la seguridad del resto de conductores. Poco después, los agentes consiguieron interceptarlo en un punto seguro, en el kilómetro 97, y procedieron a su identificación.
El conductor presentaba síntomas claros de embriaguez, por lo que se le realizaron las pruebas de alcoholemia. Los resultados fueron de 1,18 y 1,14 miligramos por litro en aire espirado. Estas cifras multiplican por siete el límite máximo permitido para conductores profesionales, fijado en 0,15 miligramos por litro.
Se trata de un hombre de 49 años y nacionalidad rumana al que se le imputa un presunto delito contra la seguridad vial. Las diligencias fueron remidas al juzgado de instrucción de guardia de Guadalajara.
La Guardia Civil recuerda que conducir con una tasa de alcohol superior a la permitida constituye un delito tipificado en el artículo 379 del Código Penal. En caso de condena, la pena puede ser de prisión de tres a seis meses, multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad durante 31 a 90 días.
Además, en cualquier caso, el infractor se enfrenta a la pérdida del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por un periodo de uno a cuatro años.