El cuerpo presentaba signos compatibles con haber sufrido una descarga eléctrica y se encontraba en avanzado estado de descomposición
El informe preliminar de la autopsia que han realizado al cadáver del jugador del Córdoba FC, Álvaro Prieto, de 18 años, revela que el joven murió electrocutado el mismo día de su desaparición, el pasado jueves, por lo que se trataría de una muerte accidental, sin descartar de momento otras hipótesis.
La Policía Nacional continúa investigando el hallazgo del cadáver este lunes, entre dos vagones de un tren de Media Distancia en la estación sevillana de Santa Justa, un tren que llevaba parado y sin prestar servicio desde agosto. El cuerpo ha sido hallado en el hueco exterior hay entre los vagones.
A la espera de los resultados definitivos de la autopsia, las primeras conclusiones del informe preliminar indican que el joven tenía quemaduras en sus manos y signos compatibles con una descarga eléctrica teniendo en cuenta los cables de alta tensión de acople entre los vagones, según ha adelantado El Mundo y confirman fuentes policiales. Además, se sabe que murió el mismo día de la desaparición por el estado que presentaba el cuerpo, en avanzado estado de descomposición.
La Policía continúa investigando lo ocurrido para determinar cómo pudo llegar hasta allí el joven y cuáles fueron sus últimos pasos. Para ello se están revisando las grabaciones de todas las cámaras de seguridad de la estación y se ha inspeccionando el lugar en el que ha aparecido el cadáver para poder realizar una reconstrucción de los hechos.
Ha sido una cámara de TVE la que ha captado el cuerpo del joven entre dos vagones en un tren de Media Distancia que estaba realizando una maniobra interna, sin prestar servicio de viajeros, en una vía de apartado del Centro de Tratamiento Técnico de Santa Justa (Sevilla), a un kilómetro de la estación.
Renfe ha confirmado que el tren se encontraba sin prestar servicio desde hace semanas y no se había movido desde el pasado 24 de agosto. El tren estaba averiado y no había realizado ningún movimiento ni había sido sometido a ninguna revisión ni mantenimiento hasta este lunes, han informado desde la compañía.
Álvaro Prieto intentó entrar en un tren a primera hora de la mañana del jueves para el que había comprado billete para volver a su casa en Córdoba, pero le fue imposible, ya que no pudo enseñárselo al revisor debido a que tenía el teléfono sin batería después haber pasado la noche de fiesta con amigos en una discoteca de Sevilla.
Tras intentar entrar en otro tren, también sin éxito, las cámaras le grabaron saliendo de la estación. Se sospecha que volvió a acceder a la zona de vías por algún lugar restringido o por alguna zona poco segura hasta llegar al tren donde ha aparecido su cuerpo, aunque todavía quedan incógnitas por resolver en un caso que ha conmocionado a toda España.