Denuncian la disminución de autobuses a pesar del aumento de viajeros
Los conductores de los autobuses urbanos de Alcalá de Henares, gestionados por la empresa Monbús, anuncian movilizaciones para el mes de septiembre ante el deterioro de sus condiciones laborales.
Así lo ha manifestado José Javier Páez, del Comité de Empresa, en una entrevista concedida a Onda Cero Alcalá y recogida por MiraCorredor.tv. Se quejan de que se ha reducido el número de autobuses que circulan por las calles en los últimos años y eso acarrea problemas para la ciudadanía y para los propios trabajadores, que tienen que cumplir unos tiempos sin apenas posibilidad de descanso.
Según Páez, «en la mayoría de las líneas tenemos unos tiempos que son imposibles de incumplir, hay líneas en las que el conductor se tira 7 u 8 horas seguidas sin poderse mover del asiento, si tiene que orinar tiene que bajarse a un bar y hacerlo en dos minutos, y ya llega tarde».
Calculan que se han suprimido entre 18 y 20 autobuses en los últimos años, sin embargo, el número de viajeros ha ido en aumento. Una situación, ha dicho, que afecta a la frecuencia de paso y alarga las esperas de los usuarios, y que además está provocando un incremento de las bajas por estrés, ansiedad y lesiones de espalda entre los más de 120 conductores de autobuses urbanos de Alcalá de Henares.
Así se lo han transmitido hace poco al alcalde de la ciudad, al concejal de Movilidad, al Consorcio Regional de Transportes y a la empresa concesionaria del servicio, a la que han dado un ultimátum: si no se ponen soluciones, habrá movilizaciones en el mes de septiembre.
Reclaman también que se revisen los problemas de asfaltado o la situación de algunas paradas que no son aptas para los minusválidos.
Según los cálculos que maneja el Comité de Empresa, el aumento de viajeros ha sido notable. Por ejemplo, en la Línea 1, en mayo de 2012 cada autobús movía de media 22.000 viajeros y en mayo de 2017 la cifra aumenta hasta los 26.600. Pasa lo mismo en la Línea 7, que pasa de 20.000 a 25.000 y en la Línea 3, de 10.900 a 18.400. Una subida que creen que se debe en parte a la recuperación económica y a la puesta en marcha del nuevo Abono Joven de la Comunidad de Madrid.
Ante esta situación, piden más autobuses para que el servicio se pueda prestar en mejores condiciones, que puedan beneficiar tanto a los usuarios como a los trabajadores.
