La Comunidad de Madrid pide a la Delegación del Gobierno que actúe de inmediato con soluciones ágiles y eficaces que garanticen a los agricultores madrileños que sus explotaciones agrarias están seguras
La Comunidad de Madrid aprobará en el segundo semestre de este año una línea de ayudas directas por hectárea de olivar para proteger a los agricultores y sus cosechas. Así se lo han trasladado los consejeros de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López, y la de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, Paloma Martín, en la reunión que han mantenido en la Real Casa de Postas con representantes de la Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Madrid para analizar la ola de robos de aceituna que se está produciendo en la región y el clima de inseguridad que está provocando en el campo.
Asimismo, el Gobierno regional ha iniciado los trámites para la redacción de un documento que acredite el origen de la aceituna transportada desde que se recoge hasta que se deposita en una explotación para su almacenamiento. De esta forma se va a poder verificar la procedencia y el destino de la oliva.
López ha señalado que «una vez más, tenemos que recordar al Ministerio del Interior que esta Administración autonómica carece de competencias en materia de seguridad, por lo que pedimos a la Delegación del Gobierno que actúe de inmediato con soluciones ágiles y eficaces que garanticen a los agricultores madrileños que sus explotaciones agrarias están seguras y protegidas frente a posibles sustracciones. Nos encontramos ante un problema que puede poner en riesgo la supervivencia económica de muchas familias que viven del campo».
El pasado mes de julio la Comunidad puso en marcha el Centro de Coordinación Municipal (CECOM), para mejorar la actuación coordinada entre los distintos Cuerpos de Policías Locales. López ha destacado la idoneidad de este instrumento para ser empleado en mejorar la colaboración con Policía Nacional y Guardia Civil y afrontar conjuntamente este problema de inseguridad generado recientemente en las zonas rurales de la región.
Por su parte, Martín ha asegurado que «los agricultores y ganaderos madrileños saben que el Gobierno regional está a su lado para escucharles y ayudarles en todo lo que podamos. Tenemos claro que un campo vivo es esencial para garantizar el suministro de alimentos, la preservación de nuestro patrimonio natural, la prevención de incendios forestales, y la vertebración del territorio»
Para abordar esta situación, el próximo 14 de febrero, a propuesta de la Comunidad de Madrid, tendrá lugar una reunión a tres bandas entre el Ejecutivo regional, ASAJA y Guardia Civil.
Desde que comenzaron los robos, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura ha mantenido el contacto directo con los afectados, y el 3 de febrero se remitió un escrito a todas las almazaras para trasladarles su preocupación por la grave lesión a los intereses de las explotaciones agrícolas, ofreciéndoles ayuda para tratar de detectar toda aquella mercancía que pudiera tener una procedencia sospechosa o ilícita.
En la región se dedican unas 30.000 hectáreas al cultivo del olivar, lo que representa el 1,2% de la superficie nacional. Este se localiza en 97 municipios madrileños, fundamentalmente en la zona sur, aunque también está presente en el centro y este de la región. La Campiña y Las Vegas son las comarcas con mayor extensión de este cultivo.