La reforma de la plaza comenzó el pasado 22 de marzo y está previsto que las obras duren doce meses
El Ayuntamiento de Madrid está estudiando recuperar los toldos en las zonas más soleadas de la Puerta del Sol para paliar la falta de sombra que produce que no se puedan plantar árboles en el marco de la reforma del kilómetro cero de la capital.
La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, ha explicado hoy en la comisión de su ramo que se «está estudiando buscar zonas de sombra que podrían darse a través de unos toldos que antiguamente se tenían, en la zona más soleada de la plaza».
Se trata de introducir algún elemento de sombra que sea compatible con las condiciones de la losa que cubre el intercambiador así como con las prescripciones de la Comisión Local de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid.
José Manuel Calvo, del Grupo Mixto, y responsable de Desarrollo Urbano Sostenible en el mandato de Carmena, ha incidido en que hay que tener en cuenta que «hay un intercambiador debajo con una losa de espesor muy justo que impide la plantación de arbolado de medio y gran porte», «porque la losa no podría soportar el peso de la tierra, el agua y los árboles».
La reforma de la Puerta del Sol, que recupera el proyecto ganador de un concurso en 2014 del Colegio de Arquitectos, fue aprobada en Junta de Gobierno el pasado 24 de febrero, con una inversión de 10,7 millones de euros y una duración prevista de doce meses.
Las obras comenzaron el 22 de marzo y suponen la reordenación de los elementos para que la plaza sea más diáfana, y la eliminación de la entrada de Cercanías de la estación de Sol que se conoce como La Ballena.