Este sábado la Policía tuvo que desalojar una zona del parque del Oeste con miles de jóvenes haciendo botellón y donde se produjeron incidentes y tres heridos por arma blanca
El Ayuntamiento de Madrid trasladará a la Fiscalía de Menores la información de los comas etílicos que se han producido durante los macrobotellones, ya que está acudiendo a estas citas «gente muy joven y es responsabilidad de las familias conocer en qué situación se han encontrado a sus hijos».
Aí lo ha manifestado en Onda Madrid la delegada de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento, Inmaculada Sanz, que se ha referido a estos macrobotellones resaltando la juventud de las personas que se concentran, en muchos caso de 14, 15 y 16 años.
Este sábado la Policía tuvo que desalojar una zona del parque del Oeste donde se habían concentrado «varios miles» de jóvenes para hacer botellón y donde ocasionaron daños a vehículos y mobiliario urbano.
Los sanitarios del SAMUR atendieron en el lugar a diez personas por intoxicaciones etílicas, a veinte por lesiones traumáticas por peleas y a tres por heridas por arma blanca. Sanz ha asegurado que las intervenciones referidas a los comas etílicos se trasladarán a la Fiscalía de Menores.
Para ello, en estas convocatorias se ha desplegado un equipo de agentes tutores a fin de que en caso de producirse intoxicaciones etílicas en menores de edad, tras ser atendidos por los sanitarios, inicien los expedientes de protección para su remisión a la Fiscalía de Menores.
La delegada ha reconocido que la noche del viernes «se pudieron controlar bastante bien» las concentraciones pero hubo «complicaciones importantes» la noche del sábado en el parque del Oeste, donde al final del botellón un grupo de unas 200 personas provocaron «incidentes importantes».
«Estamos preocupados por estas situaciones», ha lamentado. También ha dicho que «en algunos casos» sí que están identificados los que provocan los incidentes ya que son «sospechosos habituales», pero también participan personas que no están registradas.
Asimismo ha confirmado que a estos macrobotellones van miembros de bandas juveniles o menores no acompañados para robar o lesionar gravemente a otros jóvenes, algo que está siendo investigado por la Policía Nacional.
Sanz ha adelantado que se seguirán incrementando los dispositivos de seguridad pero ha criticado que en Madrid hay un déficit de 1.500 policías y por ello va a seguir exigiendo al Gobierno de Pedro Sánchez una «mayor implicación» ya que «son cuestiones de orden público».
La Policía Municipal de Madrid interpuso este fin de semana 886 multas por consumo de alcohol en vía pública, un 72 por ciento más que el pasado fin de semana, cuando se interpusieron 513), según han informado a Efe fuentes municipales.