España está en el grupo de enemigos, junto con el resto de países de la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá, entre otros
España, así como todos los países de la Unión Europea, además de Estados Unidos, Japón y Canadá, están incluidos en la lista de naciones hostiles que ha confeccionado el Gobierno de Vladimir Putin. La lista, además de estados, también incluye territorios extranjeros que, según Moscú, cometen «acciones hostiles» contra la Federación Rusa, las empresas y los ciudadanos rusos.
Según la agencia de noticias rusa Interfax, la orden con el listado ha sido firmada por el primer ministro, Mikhail Mishustin, y forma parte del Decreto del Presidente de la Federación Rusa dictado el 5 de marzo sobre el procedimiento temporal para cumplir obligaciones con ciertos acreedores extranjeros.
La lista incluye a los 27 estados miembros de la Unión Europea, quienes han aprobado fuertes sanciones contra Rusia tras su invasión de Ucrania. Además se definen como países hostiles otros como Australia, Albania, Andorra, Gran Bretaña (incluida la isla de Jersey y otros territorios de ultramar que controla, como la isla de Anguila, las Islas Vírgenes Británicas y Gibraltar), Islandia y Liechtenstein.
También están en la relación Micronesia, Mónaco, Nueva Zelanda, Noruega, República de Corea, San Marino, Macedonia del Norte, Singapur, Taiwán, Montenegro, Suiza, Japón y la propia Ucrania. No figuran en la lista, entre otros, Corea del Norte, China y los países latinoamericanos Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Se trata de una de las primeras respuestas del Gobierno ruso a las sanciones impuestas por numerosos países extranjeros, unas sanciones que han provocado la depreciación histórica del rublo y se ven acompañadas de la congelación de una parte de los fondos de las autoridades en el extranjero, lo que impide al Banco Central sostener la moneda rusa, que desde el 1 de enero ha perdido un 45% de su valor.
Según el decreto, Rusia ha recordado que el propio Estado, los ciudadanos rusos y las empresas que tengan obligaciones en divisas con acreedores extranjeros de la lista de países «hostiles» pueden pagarlas en rublos. Se aplica a pagos superiores a diez millones de rublos al mes (más de 66.000 euros) o una cantidad similar en moneda extranjera.