Sánchez y Mohamed VI pactan una declaración conjunta en la que no se menciona la integridad territorial de España aunque el presidente del Gobierno dice que «está fuera de toda duda»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pactado este jueves con Marruecos la reapertura gradual y ordenada de las fronteras terrestres en Ceuta y Melilla, que incluirá la puesta en marcha de sendos puestos aduaneros de mercancías aceptados por las autoridades marroquíes.
Se trata de uno de los principales acuerdos a los que han llegado España y Marruecos en la reunión que han mantenido en Rabat Sánchez y el rey Mohamed VI tras el cambio de posición de España al avalar la propuesta de Marruecos para la autonomía del Sáhara Occidental, un giro rechazado por todos los partidos y que sólo respalda el PSOE.
Sánchez, en una rueda de prensa posterior al encuentro, ha resaltado que la reunión ha sido importante para los dos países porque inician una nueva etapa en sus relaciones fundamentada en «una comunicación permanente, la transparencia y el respeto mutuo y el de los acuerdos firmados».
El presidente del Gobierno ha afirmado que la hoja de ruta pactada con Mohamed VI es «duradera y ambiciosa» y que España y Marruecos están ante un momento histórico y dispuestos a colaborar en beneficio mutuo. El Gobierno español desea que esta nueva etapa se fundamente en principios sólidos y claros que permitan la gestión de los asuntos de interés de manera concertada.
Uno de los objetivos de esta nueva etapa va a serla recuperación de la plena normalidad en la circulación de bienes y mercancías en los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla. De ahí que se haya anunciado que se va a proceder de forma «progresiva y ordenada» a la reapertura de los pasos fronterizos para garantizar un flujo de personas con seguridad y de acuerdo a los requisitos sanitarios y necesarios.
Las mercancías, según ha indicado Sánchez, también van a circular con normalidad en régimen de expedición comercial a través de los respectivos puestos aduaneros. Marruecos no había aceptado hasta ahora un puesto aduanero en Ceuta aunque sí lo había permitido en Melilla hasta que fue cerrado en 2018.
España y Marruecos inician una nueva etapa basada en la comunicación permanente, la transparencia, el respeto mutuo y de los acuerdos firmados. Afrontamos con responsabilidad este momento histórico que contribuirá a asegurar los intereses, estabilidad e integridad de ambos países pic.twitter.com/KmhvlKD6fI
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) April 7, 2022
El presidente del Gobierno ha explicado que la normalización de la circulación de bienes y mercancías va a permitir también la reanudación de las conexiones marítimas de forma «inmediata», según la declaración conjunta firmada por los dos países, y la preparación de la Operación Paso del Estrecho.
De la misma forma, Sánchez ha destacado que se ha acordado la puesta en marcha de grupos de trabajo para la concertación en todos los asuntos de interés común, como es el caso del relativo a la inmigración ya existente. Unos encuentro que culminarán en una Reunión de Alto Nivel que está pendiente desde que se suspendiera la prevista en 2020 y que se convocará para antes de final de año.
«Iniciamos por tanto una nueva andadura en nuestra larga historia compartida que debe permitirnos afrontar con seguridad los retos y las múltiples oportunidades para el futuro de esta estrecha colaboración, un auténtico partenariado para el siglo XXI», ha subrayado el líder del Ejecutivo.
Preguntado por el hecho de que la declaración conjunta no aluda a la integridad territorial de los dos países, Sánchez ha aseñalado que la española «está fuera de toda duda» y que lo que se hace es gestionar el fenómeno fronterizo en Ceuta y Melilla de manera concertada y sin actos unilaterales.
El rey Mohamed VI, por su parte, invitó a Sánchez a participar en el «iftar» (la comida de ruptura del ayuno por el ramadán, de este jueves. Una celebración en la que estuvieron presentes el hijo del monarca, el príncipe heredero Muley El Hasán; el hermano menor del rey, el presidente del Gobierno marroquí, el consejero del rey Ali Himma, y el ministro de Exteriores marroquí.
En la comida también estuvieron presentes el ministro español de Exteriores y el embajador de España en Marruecos. Previamente, en la reunión mantenida por el presidente del Gobierno español y el rey de Marruecos, de unos tres cuartos de hora y que se desarrolló en español y francés, Sánchez trasladó al monarca alauí un saludo de Felipe VI y sus deseos de paz y felicidad, según informa Efe.