La Policía ha requisado ya varios balones a menores que, a su juicio, practican juegos peligrosos y agresivos
La Policía de Velilla de San Antonio ha informado este viernes que ha requisado varios balones a los niños que juegan a la pelota en la Plaza de la Constitución, la plaza principal del municipio, sin respetar las normas de convivencia, «molestando y llegando a poner en riesgo al resto de personas que utilizan dicho espacio».
Según ha detallado el cuerpo municipal, se han incautado varios balones de fútbol porque cuando los agentes intervienen «el balón no es de nadie y prefieren quedarse sin él, antes de hacer frente a la denuncia y al coste económico».
La Policía recuerda que son menores de edad y que los que tendrán que hacer frente al pago de las sanciones son sus padres, y explica que entre las funciones de los agentes está la de velar por el respeto a las normas de convivencia, interviniendo «cuando se observan juegos impropios para la seguridad y tranquilidad de las personas que se encuentran en la plaza», y para los negocios que hay en ella.
En el texto difundido a través de Facebook, señala que cuando los niños ven a los policías, «intentan dejar de jugar o jugar de una forma más tranquila, queriendo demostrar que su juego es inofensivo, para una vez abandonada la plaza, volver a sus juegos peligrosos y agresivos para las personas, teniendo otros lugares para la práctica del futbol sin inconvenientes para los demás».
Por último, se compromete a incrementar la presencia policial, pide a los vecinos, especialmente a los padres, que se involucren, y anima a denunciar «ante el mínimo atisbo de juego peligroso efectuado por los menores».
«Niño, deja ya de joder con la pelota»
Eso cantaba Serrat y es que es un problema de convivencia tan antiguo como común en todos los espacios públicos de los pueblos y ciudades cuyas restricciones a veces entran en conflicto con el cumplimiento de los Derechos de la Infancia.
Sin ir más lejos, hace unos meses, tal y como contábamos aquí, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares aprobó en Pleno por unanimidad una medida propuesta por los niños de la ciudad a través de las Comisiones de Participación Infantil y que consistía en sustituir las placas de Prohibido jugar a la pelota por otras con mensaje positivo. El objetivo era respetar tanto los derechos de los niños a poder jugar como los derechos de los vecinos al descanso.
Lo cierto es que no son pocas las veces que este tema genera debate, entre los que están a favor de corregir este tipo de comportamientos y los que se muestran más permisivos porque creen, por ejemplo, que otras cosas molestan más.