Los manifestantes intentaron cortar la Gran Vía quemando contenedores y formando barricadas
La Policía Nacional detuvo anoche a 32 personas durante una protesta violenta contra las restricciones por el coronavirus en el centro de Madrid, en la que 12 personas resultaron heridas, entre ellas tres agentes.
Los manifestantes intentaron a última hora del sábado cortar la Gran Vía quemando contenedores y formando barricadas. Además destruyeron mobiliario urbano y lanzaron piedras contra escaparates de algunos comercios y contra la Policía.
Un total de 32 personas han sido detenidas, varias de ellas por el asalto a una tienda de Chueca y 12 resultaron heridas durante las cargas policiales, tres de ellas policías, tras unos altercados similares a los que se han producido en otras ciudades españolas.
La Delegación del Gobierno ha informado que las protestas que se iniciaron en Sol y se extendieron a Gran Vía y en las que participaron varias decenas de personas no fueron comunicadas, por lo que no contaban con autorización.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha condenado los altercados violentos y ha pedido unidad y responsabilidad. «Solo desde la responsabilidad, la unidad y el sacrificio lograremos vencer a la pandemia que asola a todos los países. La conducta violenta e irracional de grupos minoritarios es intolerable. No es el camino. Gracias, una vez más, a las FCS por garantizar la seguridad», ha escrito en Twitter.
Vox por su parte ha mostrado su respaldo a las protestas pacíficas. El presidente de la formación, Santiago Abascal, ha culpado a «a la extrema izquierda, los menas e infiltrados» de estar provocando «disturbios y saqueos» y ha pedido a la Policía, en la misma red social, que «proteja el derecho a la manifestación» e «identifique y detenga» a los que a su juicio están causando los problemas.