Los ladrones empotraron un coche robado contra la entrada del banco y huyeron en otro vehículo antes de que llegara la Guardia Civil
Una sucursal del Banco Santander en Campo Real sufrió un violento alunizaje en la madrugada del jueves. El asalto se produjo sobre las dos de la madrugada, cuando un grupo de delincuentes empotró un coche robado contra la puerta principal de la entidad bancaria, situada en el centro de la localidad.
El vehículo, un Seat Ibiza de color gris, fue sustraído previamente y utilizado como ariete para irrumpir en el interior del banco. La fuerza del impacto fue tal que el coche acabó dentro del local, provocando importantes destrozos: suelos levantados, techos caídos y mobiliario destrozado.
Los autores actuaron con rapidez, siguiendo el mismo patrón que en otros asaltos similares: acceder a las cajas fuertes y tratar de llevarse la mayor cantidad de dinero posible en pocos minutos. A la llegada de las primeras patrullas de la Guardia Civil, los ladrones ya habían escapado.
Al parecer, abandonaron el lugar a bordo de otro vehículo que les esperaba en las inmediaciones. Por ahora, se desconoce si lograron llevarse algún botín, aunque la investigación continúa abierta.
