El exministro de Transportes se defiende tras la detención de su mano derecha por el cobro de comisiones ilegales
El exministro de Transportes y diputado del PSOE, José Luis Ábalos, no se plantea dimitir tras la detención de su mano derecha y exasesor, Koldo García, exportero de puticlub, por una trama corrupta relacionada con el presunto cobro ilegal de comisiones en la adjudicación de contratos para la compra de mascarillas durante la pandemia, una operación de la Guardia Civil y la Fiscalía Anticorrupción en la que hay una veintena de detenidos.
A pesar de las voces en el Gobierno y el PSOE que han enseñado la puerta de salida al exministro, a las presiones internas, y a la contundencia expresada este sábado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Ábalos descarta entregar su acta de diputado y marcharse.
Al ser preguntado este sábado por la noche en una entrevista en La Sexta si iba a dimitir, ha respondido: «La pregunta es: ¿por qué? Si esto se hubiera producido yo siendo ministro, es evidente que tendría que haber dimitido en el momento. Soy diputado y no tengo ninguna responsabilidad sobre eso en el ámbito de mis funciones», ha dicho.
«No estoy imputado. Parece que pasamos por encima de eso. Suena más Ábalos que los responsables», ha indicado. «En ese ámbito entra la hipocresía. Me llama tremendamente la atención que quienes están presionando son quienes llevan a sus espaldas situaciones o hechos peores que este mismo. No se me está pidiendo que dimita, se me está pidiendo que abandone la vida política y prácticamente también la vida personal», ha añadido el exministro, señalando al PP.
Unas palabras que llegan después de que Sánchez haya asegurado este sábado en un acto del PSOE que la lucha contra la corrupción «ha de ser implacable, venga de donde venga y caiga quien caiga», ha afirmado el presidente del Gobierno y líder de los socialistas.
Antes, este viernes, dos ministras socialistas, María Jesús Montero y Margarita Robles, presionaron públicamente con sus palabras al diputado y exministro de Transportes para que deje el escaño. «Yo sé lo que yo haría, no puedo decir lo que el señor Ábalos quiere hacer o va a dejar de hacer, yo sé lo que yo haría», lanzó la titular de Hacienda. «Cada uno tiene que saber lo que tiene que hacer en cada momento», expresó, por su parte, la ministra de Defensa.
El PP exige su dimisión y explicaciones a Sánchez
El vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local y Análisis Electoral del PP, Elías Bendodo, ha dicho también este sábado que los protagonistas de estos primeros 100 días de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno son el «chantaje» de Puigdemont y la «corrupción» por el caso Ábalos, que la describe como «una trama de mordidas y de comisionistas, que está indignando y avergonzando al conjunto de los españoles».
Bendodo ha afirmado que «el caso Ábalos refleja una organización criminal, como la describe la Fiscalía Anticorrupción, donde están implicadas varias instituciones, con el Ministerio de Transportes de Ábalos como kilómetro cero de la corrupción».
El popular ha exigido al presidente del Gobierno que explique «por qué Ábalos pasó de ser ministro y su fontanero mayor a diputado raso y si recibió información privilegiada de la Fiscalía Anticorrupción, de la que Sánchez ha presumido controlar». También le pide que diga «los motivos por los que el implicado Koldo García pasó de ser portero de prostíbulo a consejero de RENFE, y una empresa de facturar cero euros en 2019 a 50 millones en 2020, haciendo negocio con material COVID», como apunta la investigación abierta por la Audiencia Nacional.
Ha reprochado a Pedro Sánchez que afirme «no saber nada» y le ha recordado que «tampoco sabía nada de las mordidas y las fiestas con prostitutas del caso Tito Berni, cuando se producían en el Congreso, a pocos metros de su escaño. Ahora Sánchez dice que no sabía nada de esta trama corrupta, pese a que uno de los cabecillas detenido le custodió los avales de las primarias y era mano derecha de su fontanero mayor en el PSOE en aquel momento», ha agregado.