Cualquier actuación que se pretenda llevar a cabo deberá ser autorizada por la Dirección General de Patrimonio Cultural
La Universidad de Alcalá, fundada por el cardenal Cisneros en 1499, es un ejemplo único en la historia de España, pues se convirtió en modelo para otras posteriores, como las de Toledo (1520), Baeza (1538), Oñate (1542), Burgo de Osma (1550) o Almagro (1550). Además, la fórmula Colegio-Universidad como sistema organizativo pasó a otros países europeos y americanos, dando lugar a un gran número de universidades deudoras de su modelo de los siglos XVI al XIX.
Desde un punto de vista material, el trazado de la Universidad de Alcalá en base a manzanas-islas de trazado regular constituyó un nuevo modelo de ciudad capaz de crear las condiciones adecuadas para el desarrollo intelectual. De este modo, la Universidad Cisneriana puede considerarse como el antecedente más claro de los modernos campus universitarios. Por todo ello, el Gobierno regional ha aprobado su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).
La protección de bienes a través de su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) o Bien de Interés Patrimonial (BIP) supone que cualquier actuación que se pretenda llevar a cabo sobre ellos deberá ser autorizada previamente por la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno regional, además de ajustarse a lo dispuesto en el texto de la declaración que, entre otros aspectos, regula los criterios básicos que deben respetar las intervenciones
El conjunto arquitectónico de la Manzana Fundacional Cisneriana de la Universidad de Alcalá (Patrimonio de la Humanidad desde 1998) data en su mayoría de los siglos XVI y XVII, si bien algunas edificaciones corresponden a los siglos XVIII, XIX y XX.
Doce edificios de los Siglos XVI al XX
Entre ellos destaca el Colegio Mayor de San Ildefonso, sede actual del Rectorado, cuya fachada (obra de Gil de Hontañón) constituye uno de los elementos arquitectónicos más importantes del renacimiento español. Este edificio integra elementos fundamentales para entender el desarrollo de la arquitectura de los siglos XVI y XVII, desde el estilo plateresco al barroco clasicista.
Por su parte, el Teatro Académico o Paraninfo es un espacio emblemático del arte del primer renacimiento hispano, en el que confluyen influencias de la tradición mudéjar y del renacimiento italiano. Aquí se entrega cada año, el 23 de abril, el Premio Cervantes. La Capilla Universitaria de San Ildefonso nació con carácter provisional pero ha llegado hasta nuestros días constituyendo, junto con el Paraninfo, el mejor testimonio artístico e histórico de la época de la fundación de la Universidad.
El Colegio Nuevo, Colegio Menor de San Jerónimo o Trilingüe posee en su interior el denominado Patio Trilingüe, uno de los más hermosos patios renacentistas de España. Por su parte, el Patio de Filósofos o Corral de Continuos es un elemento importante para entender la historia y el funcionamiento de la Universidad.
El Colegio Menor de San Pedro y San Pablo (actual Gerencia de la Universidad) es una de las piezas que conforman la imagen de la Manzana Fundacional Cisneriana como notable ejemplo de arquitectura religiosa del siglo XVII. El Colegio Menor de Teólogos de la Madre de Dios (actual Colegio de Abogados) es otro de los edificios más significativos de la Manzana, siendo su característica silueta con torres una de las que contribuye a dar carácter al monumento. Y el Colegio Menor de Santa Catalina o de Artistas y Físicos es un notable ejemplo de arquitectura civil del XVI.
La Hospedería de Estudiantes del Colegio Mayor es un ejemplo notable de arquitectura civil del siglo XVIII; mientras que el Casino Círculo de Contribuyentes es un edificio de notable valor arquitectónico y la aportación más importante del XIX al conjunto. El edificio de la Plaza de Cervantes nº 8 es un edificio con importante presencia en la ciudad que cierra la esquina noroeste de la Manzana. Por último, el Antiguo Hotel Cervantes, hoy sede del Centro Internacional de Formación Financiera (CIFF), destaca del resto de construcciones por su carácter cosmopolita y es la mejor aportación del siglo XX al conjunto de edificaciones de la Manzana Fundacional Cisneriana.