La Guardia Civil ha logrado recuperar gran cantidad de efectos sustraídos
Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Comandancia de Madrid, en el marco de la Operación Hábitat Perdiz han logrado desarticular un grupo criminal que se dedicaba a la comisión de robos con fuerza en viviendas unifamiliares en diferentes localidades de la Comunidad de Madrid.
La operación comenzó en el mes de agosto de este año tras detectar un aumento de delitos de robos con fuerza en viviendas de cierto nivel adquisitivo, utilizando el mismo modus operandi en las localidades madrileñas de Boadilla del Monte, Villaviciosa de Odón, Las Rozas, Pozuelo de Alarcón, San Sebastián de los Reyes y Madrid capital.
Modus operandi
El grupo lo conformaban cinco personas, tres varones y dos mujeres. Las mujeres se encargaban de llamar al telefonillo de las viviendas para cerciorarse de que no había nadie en el interior de las mismas, así como la conducción del vehículo con el que acudían a los domicilios; mientras los varones se dedicaban a consumar el delito, escalando para acceder a la vivienda y fracturando las ventanas o forzando las cerraduras de las puertas para entrar en el interior.
En algunos de los hechos se encontraron con los moradores en el interior de la vivienda, a los cuales llegaron a intimidar con una pistola simulada, reteniéndoles mientras sustraían diferentes objetos de valor.
Una vez autorizado el registro por la autoridad judicial competente en el domicilio de seguridad donde residían en Madrid, alquilado expresamente para su campaña delincuencial, se han intervenido el vehículo utilizado, el arma simulada, 10.000 euros en efectivo, así como herramientas utilizadas para perpetrar los robos; lográndose recuperar numerosas joyas, bolsos y gafas de marcas de gran valor, así como diferente material electrónico.
Los cinco detenidos, tres varones y dos mujeres de nacionalidad chilena, de entre 20 y 53 años, fueron puestos a disposición judicial por los delitos de pertenencia a grupo criminal, robos con fuerza y con violencia en casa habitada, decretándose la entrada en prisión de todos ellos por el juez instructor. El operativo ha contado con la colaboración del Área de Análisis y Monitoreo Internacional de la OCN Interpol Santiago de la Policía de Investigación de Chile (PDI) para lograr la plena identificación de los miembros del grupo investigado.