El líder era un antiguo pocero de 76 años de edad
La Policía Nacional ha detenido en Madrid a cinco peligrosos atracadores de bancos. El cabecilla era un ciudadano español de 76 años con elevados conocimientos del subsuelo madrileño ya que había sido pocero de profesión.
Los arrestados eran extremadamente violentos y durante semanas prepararon el atraco, controlando los horarios y costumbres de los empleados y estudiando la red de alcantarillado cercana a la sucursal.
La investigación comenzó en el mes de julio del pasado año. Varios individuos cometieron un robo con violencia en una entidad bancaria del distrito de Salamanca, accediendo mediante un butrón realizado desde la red de alcantarillado público.
Los hechos sucedieron a primera hora de la mañana cuando la sucursal aún se encontraba cerrada al público, esperaron la llegada del primer empleado, al que intimidaron y obligaron a desconectar la alarma y a desbloquear los retardos de los cajeros automáticos y cajas fuertes.
Tras apoderarse de más de 50.000 euros huyeron nuevamente a través del butrón por el que accedieron, dejando maniatado al empleado con bridas para evitar que pidieran auxilio.
Después de unos minutos salieron a la vía pública a una distancia lejana de la sucursal para no levantar sospechas y no ser detectados por la Policía.

Material incautado por la Policía Nacional.
Esta forma de actuar conlleva una compleja preparación del atraco, realizando vigilancias previas sobre la oficina a atracar, así como un estudio pormenorizado del alcantarillado público.
Durante el atraco uno de los detenidos era el encargado de controlar el exterior del banco, avisando a sus compañeros de la llegada de los empleados o de la presencia policial.
Durante la investigación, los agentes comprobaron que se encontraban ante conocidos y peligrosos atracadores, ya que dos de ellos habían sido detenidos en el año 2013 por idénticos hechos.
Además dos estaban fugados de centros penitenciarios y con varias órdenes de detención judicial por diversos delitos.
Tras numerosas gestiones, los agentes les localizaron en las localidades de Madrid, Fuenlabrada y Humanes donde fueron detenidos y puestos a disposición judicial.
Posteriormente los investigadores procedieron al registro de los pisos de Humanes y Fuenlabrada, donde encontraron dos armas de fuego y numeroso material utilizado para cometer el atraco: sistema hidráulico, mascarillas, guantes, gafas de protección, ganzúas, destornilladores y linternas.