Se trata de una cirugía asistida por endoscopia, menos invasiva, menos dolorosa y que minimiza la agresión sobre la imagen corporal de las pacientes
El Hospital Universitario de Torrejón, perteneciente a la red pública de la Comunidad de Madrid, ha implementado en los últimos meses una novedosa y avanzada técnica quirúrgica para el tratamiento del cáncer de mama. La mastectomía endoscópica, también conocida como cirugía endoscópica de mama, ofrece una opción intervencionista menos invasiva, menos dolorosa y más estética para abordar el cáncer de mama con las mismas garantías.
Se trata de una cirugía asistida por endoscopia que solo requiere realizar una incisión de entre 3 y 3.5 centímetros en la axila para introducir un dispositivo que permite inflar la mama con gas CO2 para crear un espacio de trabajo y, a través de una óptica, ver el tejido e introducir el instrumental quirúrgico. Es una nueva técnica de la cirugía oncoplástica y conservadora de la Unidad de Mama del centro torrejonero, que permite conservar la piel y el pezón, extirpar el tejido mamario afectado a través de incisiones mucho más pequeñas y realizar las reconstrucciones mamarias de una forma inmediata con una agresión mínima.
«Con la incorporación de esta técnica quirúrgica las pacientes se ven beneficiadas por una intervención menos invasiva, que dura muy poco y que es muy poco dolorosa», explica Lorenzo Rabadán, Jefe del Servicio de la Unidad de Mama del Hospital Universitario de Torrejón. «Además, durante la intervención, las pacientes no sangran nada porque utilizamos unos dispositivos de energía y la piel no sufre porque el gas es el que mantiene la mama estable y no se realizan tracciones», añade. Todos estos factores permiten que la paciente reciba el alta al día siguiente y que tenga una recuperación más rápida y con menos dolor.
Además, el procedimiento también tiene ventajas para los propios cirujanos: «Nos permite ver perfectamente y tener un control absoluto de la cirugía en todas las partes de la mama a través de un monitor”. “Empezamos a hacerlo con mamas pequeñas, de copa A, luego avanzamos e incluimos mamas de tamaño medio, de copa B, y ahora estamos abordando mamas de un mayor tamaño», explica el doctor Rabadán.
Se trata de una técnica efectiva para pacientes con diferentes tipos, tamaños y etapas del cáncer de mama, excepto cuando las mamas están muy caídas: «En el caso de que haya que elevar la mama porque está muy caída habría que recurrir a otra técnica quirúrgica porque no podría elevarse por endoscopia. Además de conseguir el resultado oncológico, con las cirugías de mama buscamos un fin estético para minimizar la agresión sobre la imagen corporal y que puedan tener una vida social, familiar, laboral y sexual plenamente normal durante el resto de su vida», concluye el Jefe de Servicio de la Unidad de Mama del Hospital Universitario de Torrejón.