El alcalde defiende que «una ciudad decente no puede dedicar calles a quienes llevaron a cabo un golpe de estado»
El alcalde socialista de Guadalajara, Alberto Rojo, ha materializado este martes la retirada del callejero de personas vinculadas al golpe de estado franquista de 1936, «cumpliendo así con la legislación española en materia de memoria democrática y con un acuerdo plenario del anterior mandato», ha destacado el Ayuntamiento de la localidad.
De esta manera, cinco calles adquieren nombre de mujer con figuras relevantes en la historia como María Pacheco, Margarita Salas o Brianda de Mendoza, y una de ellas, la actual Boixareu Rivera, toma el nombre de La Carrera tal y como se la conoce ya popularmente.
A la retirada de las placas con los antiguos nombres en la calle Boixareu Rivera han asistido varios miembros de la corporación municipal junto al alcalde, quien ha definido el cambio como «un acto de justicia, de concordia y de normalización democrática». «Un gesto», ha añadido, «que ayuda a cerrar heridas y a pasar página sin caer en el olvido».
Justo antes de cambiar la primera de las placas, Rojo aseguraba que «una ciudad decente no puede dedicar calles a quienes dieron un golpe de estado para llevarnos a una dictadura», y por este motivo, añadía, «lo que hoy hacemos es retirarles una posición de honor».
El alcalde también se ha dirigido a «algunos sectores que nos tienen acostumbrados a cierta polémica en torno a la memoria democrática» para asegurar que «nadie imagina una calle a un terrorista o a Hitler o a personas vinculadas al nazismo en Alemania».
Por último, Rojo rogaba «paciencia» a las personas afectadas por los cambios, al tiempo que pedía «disculpas» por las molestias ocasionadas y recordaba que el Ayuntamiento está «a disposición de todos ellos para ayudarles».
En los últimos días el Ayuntamiento de Guadalajara se ha vuelto a dirigir por carta a los vecinos y vecinas de estas calles para informarles de su nueva denominación y para detallarles en un listado las instituciones, organismos y empresas que efectúan de manera automática las modificaciones en la dirección a instancia del Consistorio, como las que en virtud de la Ley de Protección de Datos estiman que dicho cambio debe solicitarse por cada persona afectada.
La materialización de este cambio supone un coste de 2.000 euros y desde el próximo lunes los negocios afectados por cambios en sus rótulos, tarjetas de visita, coches de empresa o páginas web podrán solicitar ayudas de hasta 600 euros para compensar dichos gastos. En las próximas semanas, las placas metálicas colocadas de manera provisional en las calles céntricas serán sustituidas por placas cerámicas de acabado más estético, acorde al entorno del casco histórico.
Desde este martes, las siguientes calles cambian su denominación
– Calle del General Moscardó Guzmán por Brianda de Mendoza y Luna
– Calle de los Hermanos Ros Emperador por Aldonza de Mendoza
– Travesía de los Hermanos Ros Emperador por Gabriela Mistral
– Calle de Fernando Palanca por Margarita Salas
– La Plaza del Capitán Boixareu Rivera se convierte en dos calles. Lo que se conoce más bien por calle Boixareu Rivera (Plaza de Santo Domingo – Hlorieta de Bejanque) pasa a denominarse como calle de La Carrera -como ya se la denomina popularmente- y el resto de la plaza del Capitán Boixareu Rivera -el perímetro restante al Parque de La Concordia- pasa a ser calle de María Pacheco.
Salvo La Carrera y María Pacheco, el resto de nombres han sido elegidos mediante una encuesta ciudadana realizada a partir de una propuesta inicial de 20 nombres de mujeres en la Historia confeccionada por un comité de expertos académicos, ha indicado el Consistorio.