El cuerpo no presentaba signos de violencia
La Policía Nacional halló la semana pasada el cadáver momificado de una anciana de 83 años que había muerto hace cinco años.
El hallazgo se produjo en su vivienda, situada en la calle Alonso Heredia del distrito madrileño de Salamanca después de que su sobrina, que vive en Israel, diera la señal de alarma y avisara a la Policía al llevar mucho tiempo sin saber nada de ella, según informa El Mundo.
Cuando los agentes acudieron al domicilio, comprobaron que la puerta estaba cerrada con llave.
Los vecinos pensaron que se había ido al extranjero donde la mujer tenía otra casa.
Pero, al entrar en el piso, los policías encontraron el cuerpo de la anciana momificado tendido en el suelo de la cocina.
La autopsia reveló que pudo morir de un ictus, descartó cualquier signo de violencia y situó la fecha de la muerte a principios de 2014.