La Guardia Civil investiga la muerte de un empresario de 61 años cuyo cadáver fue encontrado en su domicilio de Nuevo Baztán el pasado miércoles con golpes en la cara
Según informan fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid a MiraCorredor.tv, por el momento no se ha determinado si se trata de un homicidio o de un caso de muerte por causas naturales.
La autopsia ha arrojado algunas dudas que pueden relacionar la muerte de Luis L.H. con un homicidio, aunque los investigadores están a la espera de una nueva prueba que pueda descartar esta posibilidad.
El hombre, que vivía sólo en su casa de la urbanización de Eurovillas, en Nuevo Baztán, sufría problemas del corazón y otra de las hipótesis con la que se trabaja es que sufriera un infarto y se pudiera haber golpeado al caer desplomado, hipótesis por la que se decantan, a falta de las pruebas definitivas, desde la Guardia Civil.
El cadáver del fallecido fue encontrado por un familiar el pasado miércoles sobre las dos de la tarde y los vecinos no escucharon ni vieron nada extraño en la zona que pueda aportar alguna pista a la investigación. Además la puerta de la vivienda no estaba forzada.
Los agentes tratan ahora de recabar la mayor información posible entre su entorno y analizan su teléfono móvil y sus ordenadores para intentar dar con alguna pista sobre la causa de la muerte.
Otra de las hipótesis con la que se trabaja, según publica El Mundo, es que se trate de un ajuste de cuentas por asuntos relacionados con sus negocios. Al parecer, el empresario había tenido varias empresas relacionadas con la electricidad y las reformas en la zona este de la Comunidad de Madrid. Alguna de sus empresas habría ido a la quiebra y se trata de averiguar ahora si sufrió algún tipo de amenaza y si el supuesto o supuestos homicidas querían cobrarle alguna deuda pendiente.