Se tarta de dos hombres de 30 y 40 años de edad, que eran el dueño del bar y un amigo
Los cadáveres hallados ayer en un bar de Parla estaban cosidos a puñaladas, según se desprende de la investigación que en un primer momento situó una supuesta explosión en la cocina del local como causa de la muerte de estas dos personas, dos hombres españoles de 30 y 40 años de edad.
Los cuerpos fueron hallados en el interior del bar freiduría La Espuela, en la calle Guadalajara de la localidad. Se trata del dueño del bar y un amigo. En un principio se pensó que ambas muertes podían estar relacionadas con una explosión en la cocina del local, pero posteriormente se descartó esa hipótesis.
Fue el camarero de un bar cercano quien dio la voz de alarma y llamó a los servicios de emergencias tras descubrir a los dos fallecidos. Pasadas las tres de la tarde se acercó hasta la puerta de La Espuela, extrañado de que no abriesen.
Ya en las inmediaciones percibió un intenso olor a pólvora. Cuando se asomó dentro, se encontró con una escena dantesca. Dos cuerpos inmóviles, cristales rotos y sangre esparcida. Llevaban varias horas muertos y en el suelo se encontraron tijeras y cuchillos ensangrentados, según publica El Mundo.
La Policía Científica realizó una inspección ocultar del local para tratar de encontrar alguna pista sobre el presunto autor o autores del apuñalamiento, aunque tampoco se descarta que fuera una reyerta entre los dos hombres fallecidos. La investigación deberá determinarlo.
Los vecinos no escucharon nada extraño, por lo que la hipótesis de la explosión no se sostenía. La autopsia deberá examinar ahora los cuerpos para obtener nuevas pruebas sobre lo ocurrido, un extraño suceso que ha conmocionado a todo el vecindario.