El suceso dejó tres heridos, uno de ellos grave
La Policía Judicial de la Policía Nacional mantiene abierta una investigación para esclarecer las causas del accidente que el sábado dejó tres heridos, uno de ellos grave, al tumbar el viento una torre de iluminación en la Huerta del Obispo de Alcalá de Henares, donde había un concierto programado de música celta con motivo del Mercado Cervantino.
Fuentes policiales han confirmado a MiraCorredor que se está investigando el suceso por si pudiera derivar en algún delito. Se trata de averiguar qué pudo fallar, si la torre que cayó, y que iluminaba una zona de juegos, se encontraba bien anclada, si fue derribada por el viento o por otra circunstancia. También se investiga si se cumplieron las medidas de seguridad necesarias en un evento de estas características.
En el accidente, que ocurrió sobre las 21 horas, tres personas resultaron heridas, entre ellas una mujer de 60 años, vecina de Parla, que continúa ingresada en estado grave en el Hospital Príncipe de Asturias de la ciudad complutense.
Desde el Ayuntamiento indicaban este domingo en Twitter que estaban pendientes de la evolución de los heridos y que se ponían a disposición de los familiares.
El Consistorio remarcaba que se debió a «inesperadas fuertes rachas de viento», pero la AEMET sí emitió un aviso amarillo por fuertes lluvias y viento en la zona de 20 a 22 horas, aunque, al parecer, lo hizo poco antes de que ocurrieran los hechos.
PP, Cs, Vox y Unidas Podemos-IU, por su parte, también se han solidarizado con las víctimas, a través de las redes sociales, y han prometido indagar sobre las causas.
Por poco nos aplasta a mi hija y a mi
Es uno de los testimonios recogidos por MiraCorredor de personas que se encontraban en el lugar. Todas coinciden en que se levantó una fuerte ráfaga de viento, la torre cayó y la gente corría despavorida.
«Nos llevamos un buen susto. Casi me cae encima y a mi hija de 4 años. Justo vi que se estaba cayendo cuando se levantó una especie de tornado y salí corriendo hacia adelante», contaba una testigo.
«Mi padre miró para atrás, al escuchar el fuerte ruido, porque pensaba que me había caído a mi», relataba.
El vendaval, además, arrancó las lonas de los puestos, tiró algunas ramas y árboles, se llevó por delante la taquilla de los torneos medievales, causó algún destrozo material en la granja de animales y levantó una gran polvareda por el suelo de tierra del recinto.