También habrá un dispositivo especial con 220 policías, drones y control de acceso en el centro de Madrid para evitar aglomeraciones
Las comunidades autónomas se cierran perimetralmente desde esta medianoche, aunque algunas mantienen los cierres desde antes del puente de San José. En el caso de la Comunidad de Madrid, el cierre perimetral estará en vigor desde el 26 de marzo al 9 de abril, tal y como establece el acuerdo alcanzado por los gobiernos autonómicos y el Ministerio de Sanidad en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
La Comunidad de Madrid recurrió ante la Justicia la medida pero la acatará, por lo tanto queda prohibida la entrada y salida de personas durante el citado periodo salvo causa debidamente justificada (motivos laborales, médicos, formativos, legales o de fuerza mayor, entre otros). Para supervisar los desplazamientos, se desplegarán controles en las principales vías de entrada y salida de las regiones, así como en estaciones de tren y autobuses y aeropuertos.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció ayer que Tráfico va a intensificar la vigilancia y control de los trayectos de corto recorrido en Semana Santa y que 64.200 agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil (más de 4.800 en Madrid) velarán por el cumplimiento de las restricciones. «Seguimos en una situación excepcional y debemos permanecer en casa y reducir la movilidad al máximo», dijo Marlaska.
Los centros de gestión de tráfico podrán establecer, si así fuera necesario, medidas de ordenación de la circulación en recorridos cortos en sus respectivos territorios. Y al no prever que los conductores realicen viajes largos debido a las restricciones a la movilidad, la DGT levantará las que habitualmente impone en Semana Santa y puentes a los vehículos pesados a fin de que puedan circular para poder abastecer a los núcleos urbanos.
Con un despliegue de 64.200 agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado, a los que se añadirán los efectivos de las policías autonómicas y locales, el Gobierno quiere asegurar el cumplimiento de las medidas acordadas el pasado 10 de marzo en el Consejo, las mismas que se aplicaron en el puente de San José, en el que se realizaron 162.000 controles sobre personas y vehículos y se formularon 9.549 sanciones en todo el país.
Además del cierre perimetral, del 26 de marzo al 9 de abril, y del toque de queda fijado como máximo a las 23:00 horas en toda España, se deben limitar a un máximo de 6 personas las reuniones sociales en espacios públicos abiertos y a un máximo de 4 en espacios públicos cerrados, quedan prohibidas las reuniones de no convivientes en espacios privados y cada comunidad puede aplicar sus propias restricciones, más duras o más laxas.
Igualmente, durante la Semana Santa no se podrán celebrar eventos masivos de cualquier índole que impliquen aglomeración o concentración de personas, como las tradicionales procesiones, y los eventos en espacios cerrados, como las misas y otros actos religiosos, seguirán las normas de aforo y otras medidas establecidas según el nivel de alerta de cada comunidad o ciudad autónoma.
Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid ha presentado su propio dispositivo contra posibles aglomeraciones en la capital a lo largo de la Semana Santa (del 26 de marzo al 4 de abril) que incluye un refuerzo policial de hasta 220 policías municipales en algunos de los días así como controles a la entrada de lugares de culto. Se espera que los días de mayor afluencia sean el sábado 27 de marzo, el jueves 1 de abril, el viernes 2 y el sábado 3.
El plan será muy similar al de Navidades con especial vigilancia en el centro de la capital teniendo también en cuenta el resto de los distritos de la ciudad. El refuerzo policial será de entre 150 y 220 policías municipales diario, que se suman al personal operativo de los turnos correspondientes, y se controlará el acceso del tráfico a la zona Centro, con especial atención a parques y zonas verdes, para lo que se utilizarán drones.
En el caso de que se produzca una gran afluencia de personas, se contempla la limitación de acceso en las calles Preciados y Carmen y la implantación de un solo sentido peatonal en ambas calles, como ocurre en el dispositivo de Navidad, por lo que el acceso a Preciados será por la Puerta del Sol y a la Calle del Carmen por la Plaza de Callao, además podrían instalarse paneles informativos para la ciudadanía.