El lago se vaciará en noviembre para reformarlo por completo
Con una extensión de ocho hectáreas y más de 164.000 metros cúbicos de agua, el lago de la Casa de Campo será vaciado en noviembre y permanecerá seco ocho meses para que el Ayuntamiento de Madrid pueda construir un nuevo muro en su perímetro porque el actual sufre desprendimientos.
Según adelanta ABC, se restaurará el vaso, se construirá un nuevo cerramiento de contención y se reformará el entorno del estanque, que incluirá una zona de playa, nuevos itinerarios peatonales y la renovación completa del mobiliario urbano y de las instalaciones náuticas.
Los trabajos de rehabilitación costarán más de 2.600.000 euros y las obras se prolongarán hasta julio de 2018.
Por otro lado, en el área del lago que se sitúa frente a los quioscos se instalarán bancos con y sin respaldo y hamacas, para facilitar el uso habitual de este espacio.
Asimismo, se eliminarán los vestigios del antiguo embarcadero, que permanece desde hace años en desuso. Este rincón se aprovechará para crear un mirador, ya que la orientación es perfecta para observar el Edificio España, la Catedral de la Almudena, el Palacio Real y otros iconos de la capital.
La inclinación de la explanada de césped donde se ubica el conocido «plátano gordo», el árbol bicentenario de la Casa de Campo, será aprovechada para desarrollar en esta parte una playa, aunque no será de arena, y lo más probable es que sirva como solarium, no como zona de baño, pero está todavía por definir.
De los 13.911 peces detectados se han identificado carpas común y royal, carpines, percasoles y gambusias. Las especies exóticas o invasoras serán sacrificadas, así como los ejemplares enfermos. El resto se trasladará al río Manzanares. Y después de las obras se repoblará el lago con tencas, que son peces autóctonos.