Moruno, gordo y antiguo son las tres variedades cultivadas en la finca La Isla que se venderán en los supermercados que Alcampo tiene en la región
La Comunidad de Madrid comercializará por primera vez tres variedades de tomate tradicional recuperadas en la región, conocidas como moruno, gordo y antiguo, que habían desaparecido de los campos madrileños en los años 60 tras el éxodo rural y han sido recuperadas por el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA). Se estima que la producción total sea de 40.000 kilos entre los meses de julio y octubre.
En la finca La Isla, propiedad del IMIDRA en Arganda del Rey, los investigadores estudian la evolución de estas tres variedades de tomate, que se pondrán a la venta en todos los supermercados que Alcampo tiene en la región.
«Este proyecto es una muestra más de la apuesta de la Comunidad de Madrid por el desarrollo agrícola y los productos locales de máxima calidad en nuestra región, que además ayuda a revitalizar el entorno rural», ha explicado la consejera de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad, Paloma Martín, quien ha destacado que el Gobierno regional pretende «seguir impulsando la investigación agroalimentaria para mejorar la calidad de vida de los madrileños».
Estas tres variedades de tomate, de altísima calidad, forman parte de los 451.000 plantones de distintas variedades hortícolas donados en abril por la Comunidad de Madrid a 500 agricultores madrileños, tras la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. Esta actuación se enmarca en el Plan de Apoyo al sector primario que impulsó el Ejecutivo madrileño para minimizar el impacto del virus en el descenso de ventas.
Del campo a Alcampo, sin intermediarios
Los tomates cultivados proceden de 12.000 plantones donados por el IMIDRA a 3 agricultores madrileños, 4.000 a cada uno. Cada productor ha destinado 1 hectárea de sus fincas a esta plantación de tomates, utilizando un sistema de cultivo al aire libre sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Los agricultores han contado, en todo momento, con el asesoramiento de los investigadores del IMIDRA, quienes han llevado a cabo el proceso de recuperación de estas variedades de tomate, tras una investigación exhaustiva. El resultado de este proyecto ha sido una producción de 40.000 kilos, que ha sido comprada íntegramente por Alcampo, en sus tres variedades: moruno (17.000 kilos), antiguo (11.000 kilos) y gordo (12.000 kilos).
Apoyo al sector primario y a la industria alimentaria
El Gobierno regional destaca que este proyecto «afianza el apoyo a la comercialización en circuito corto de venta a gran escala del producto tradicional madrileño y de temporada». La iniciativa se encuadra en la campaña del Ejecutivo autonómico para promover el consumo de alimentos locales, apoyando de esta manera al sector primario y a la industria alimentaria madrileña tras la crisis provocada por el Covid-19.
También forma parte del Plan de Acción para la Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (Plan Terra), una iniciativa de la Comunidad de Madrid para mejorar la competitividad y la comercialización de los productos agrícolas de proximidad y favorecer el relevo generacional, así como la implantación de sistemas de producción más sostenibles.