El chequeo neonatal confirma su buen estado de salud y sus primeras ocho semanas serán vitales
A las 4 de la madrugada de este pasado lunes comenzaban las primeras contracciones y el feliz acontecimiento se producía a las 8.30 de la mañana cuando la madre, Hua Zui Ba, comenzaba a emitir vocalizaciones y se preparaba para el momento del parto que, como madre experta, ha sido más tranquilo.
Tras expulsar a la primera cría, rápidamente la cogía en su regazo para lamerla mientras el cachorro se movía de forma enérgica y emitía fuertes sonidos. Pasadas las 12 de la mañana, asomaba la segunda cría, una sorpresa no del todo inesperada en esta especie, apuntan desde el Zoo de Madrid.
Las crías que nacen con la piel rosada serán totalmente dependientes de su madre los cuatro próximos meses hasta que puedan caminar por sí mismas y ser presentadas en la pagoda. Se trata del segundo parto gemelar de osos panda en la historia de Zoo Aquarium de Madrid.
Después del parto de ayer, el equipo técnico y veterinario del Zoo, en estrecha colaboración con dos técnicos de cría de la Base del Panda Gigante de Chengdu, han llevado a cabo hoy el primer examen neonatal en el que se ha ligado y desinfectado el cordón umbilical.
Además, han dado un peso de 171,4 y 137,4 gramos, respectivamente. En cuanto al sexo, aún sigue siendo una incógnita ya que los caracteres sexuales no están muy marcados todavía. En los próximos días, los técnicos de Chengdu podrán confirmarlo con mayor seguridad.
El Zoo recuerda que las primeras ocho semanas serán vitales para estas delicadas crías que se irán intercambiando en una incubadora para asegurar, individualmente, la lactancia materna de ambas en un dormitorio donde gozarán de mayor tranquilidad y bienestar que les facilitará el desarrollo poco a poco.
De esta manera se busca asegurar su supervivencia hasta que abran los ojos, comiencen a pigmentar su piel en unos 20 días y sustituyan el pelo por el lanugo blanco que las cubre en estos primeros días.
No será hasta los dos meses y medio, aproximadamente, cuando estén lo suficientemente fuertes. En ese momento, se les podrá poner un nombre con simbolismo hispano-chino que se someterá a votación a través de las redes sociales del Zoo de Madrid.